Córdoba necesitaría 150 litros de agua para salir del estado de emergencia por sequía

La Empresa Municipal de Aguas de Córdoba (Emacsa) ha puesto en marcha una batería de medidas de ahorro de agua tras la reciente declaración del estado de emergencia por sequía en la capital. Así lo ha destacado el presidente de esta entidad pública, Jesús Coca, quien ha apuntado que el objetivo es "reducir aún más el consumo, pasando del 5% de ahorro actual al 10%". Coca ha informado de este nuevo escenario tras la celebración de la primera Comisión de Sequía del Abastecimiento de Córdoba, en la que también han participado el director-gerente, Rafael Carlos Serrano, así como los responsables de diversas áreas técnicas de la empresa pública.

En declaraciones a COPE, el presidente de Emacsa ha asegurado que el suministro domiciliario de agua "no corre peligro", aunque, en principio, el estado de emergencia se va a mantener en la capital durante, al menos, los próximos tres meses. Para salir de este estado, Emacsa calcula que tendrían que caer 150 litros de lluvia hasta final de año.

La Comisión de Sequía, que ha celebrado su primera reunión con un carácter esencialmente técnico, convocará a partir de ahora sesiones periódicas en las que podrán incorporarse otras entidades y organismos implicados en el seguimiento y toma de decisiones en situaciones de sequía. Coca, dado que Córdoba ha entrado en estado de emergencia después de que el embalse del Guadalmellato --el de referencia y principal fuente de abastecimiento-- sume dos meses por debajo de 45 hectómetros cúbicos, ha enumerado las acciones que Emacsa desarrollará "de inmediato".

Para suplir esta situación, el embalse de San Rafael de Navallana es el indicado para bombear agua potable, puesto que tiene capacidad también para conducirla desde el río Guadalquivir. La calidad de las aguas de ambas zonas es peor que la del Guadalmellato, por lo que habría que implementar "técnicas distintas de depuración", según explica Coca, que solo afectarían al sabor del agua, pero no a la calidad en el consumo.

Las fuentes ornamentales, en el foco de las medidas

Entre ellas figura la reducción del 80% en el consumo de las fuentes ornamentales de la capital. En este sentido, ha aclarado que "se mantendrán en funcionamiento la de la plaza de las Tendillas y otras del Casco Histórico y algunas de las más representativas de los barrios, partiendo siempre de la premisa de elegirlas según el gasto de agua que tengan". La mayoría de las fuentes de la capital, por tanto, se mantendrán apagadas durante los próximos meses.

El presidente de Emacsa ha indicado también que esta empresa municipal va a "intensificar las campañas de concienciación y educación", así como "limitar los usos no esenciales del agua y recomendar a los grandes consumidores que reduzcan sus consumos en el 10% que nos hemos marcado y pongan en marcha planes de ahorro".