Edgar Burgos: "Los cineastas siempre nos vemos en la tesitura de querer rodar en Córdoba y no tenerlo fácil"

Córdoba esta asistiendo esta semana a su I Semana del Cine, una especie de experimento que podría servir en un futuro, y si todos los agentes implicados se lo proponen, como boceto de un posible Festival del Cine en la capital. Durante esta semana, la asociación Reccord de profesionales del sector está pulsando el ritmo de trabajo de quienes quieren dedicarse a la producción audiovisual en un futuro, los jóvenes, y de quienes ya tienen un cierto bagaje. Se está haciendo a través de conferencias, mesas redondas, proyecciones e incluso concursos express de donde saldrán nuevas ideas. En COPE hemos conversado con el artífice de todo esto, el director de cine, miembro de la Real Academia del Cine Española y presidente de Reccord, Edgar Burgos.

-Por Córdoba han pasado otros proyectos con un fondo similar al de la Semana del Cine, pero que al final no han cuajado, ¿qué hace falta en Córdoba, a rasgos generales, para poder convertir al audiovisual en un sector de oportunidades?

-Este tipo de eventos tienen que contar siempre con el respaldo del público. Si tienes una programación y una idea de fondo muy buena, pero no cuentas con el apoyo de la gente, no sirve para nada. Nosotros sentíamos que era importante que hubiera un evento de estas características en la ciudad y estamos teniendo una muy buena acogida. La idea es seguir creciendo… Como se suele decir, partido a partido… En este caso, año a año.

- ¿Podría llegar esta idea a convertirse en un Festival de Cine?

-Esto va a depender mucho de la implicación de las instituciones. El Ayuntamiento tiene que apostar por la iniciativa. Estos festivales llevan décadas funcionando y van consolidando la propuesta año tras año. La propuesta se consolida solo con el paso del tiempo.

-De Córdoba han salido grandes actores y actrices como Fernando Tejero, Macarena Gómez o el propio Álvaro Morte. Sin embargo, no terminan de tirar del carro como si ocurre en otras ciudades como Málaga…

-Sí. Yo creo que hay muy buenos embajadores. El ejemplo de Macarena esta ahí (de hecho, recibirá el premio a embajadora cinematográfica de Córdoba en este evento). Macarena es una persona que cuando puede se trae un rodaje. Lo hizo con su primera película el año pasado y siempre que tiene la oportunidad, vende la marca Córdoba allá por donde va. Pero es cierto que nos hace falta alguien que genere de forma asidua un rodaje en la ciudad y haya creación de empleo y puestos de técnico en torno a esas películas. Eso pasa, por ejemplo, en Sevilla. No se si podemos aspirar a eso realmente o es un sueño imposible, pero la verdad es que es un bonito objetivo.

- Esta semana busca, además, poner el foco en el sector juvenil. ¿Hay futuro aquí para ellos?

-Yo voy a aprovechar aquí para dar un pequeño capón a la gente joven estudiante de audiovisuales porque estoy notando cierta falta de interés. Ellos tienen que ir a buscar estas oportunidades. Cuando traemos formación o mesas redondas de profesionales que trabajan fuera, es una oportunidad estupenda para aprender de primera mano de ellos. Son talleres que en cualquier otra ciudad les costaría incluso dinero la asistencia. Echo en falta más gente joven.

- Ocurre muchas veces en Córdoba que el sector cultural esta un poco rezagado…

-Estoy totalmente de acuerdo. Yo creo que es un problema cultural de esta ciudad, y no hablo de incultura, hablo de cómo funcionamos aquí. Nos falta implicarnos y tomar la iniciativa y darle valor a las cosas que se ponen en marcha. Los principales interesados en que esto se repita es, desde mi punto de vista, la gente joven

-Precisamente son quienes más sufren la precariedad, los jóvenes. Vuestra asociación también trata de evitar la mala praxis de las empresas del sector. ¿Qué leyes se suelen vulnerar más?

-Yo entiendo que cuando uno es joven o está empezando, la profesionalización del trabajo puede generar unos términos burocráticos para los que no se está preparado. Pero si uno se quiere dedicar a esto, va a tener que conocerlos y saber lo que implica para dar ese salto de calidad.

-Otro de los temas que se han tratado en esta Semana del Cine ha sido el de ‘Córdoba como plató de rodaje’. Sin duda… esta ciudad es una estampa espectacular…

-Estamos todos de acuerdo en que es un plató de cine por explorar. Precisamente por eso, todavía no tiene una identidad cinematográfica. La realidad es que los rodajes, muchas veces, se diseñan en base a las comodidades logísticas o económicas. Hay directores cordobeses de gran envergadura que ruedan en Sevilla proyectos que están inspirados en Córdoba. Esto ocurre, simplemente, porque todos los técnicos son de allí y no es rentable armar la película a tanta distancia.

Esto nos enseña que, si desde las instituciones y los patrocinios no se les pone sobre la mesa algo a estas producciones, se van a ir a otro lado donde sí lo tengan. Siempre se tiene que ofrecer algo en contraprestación. La industria del cine tiene esa parte de impacto económico que es importante, toda esa gente que trabaja en el rodaje deja dinero en la ciudad en el que se ruede esa película, y para eso hay que invertir.