El PP gobernará en Lucena en minoría con un acuerdo programático con VOX

El Partido Popular, con Aurelio Fernández al frente, va a gobernar en minoría en Lucena, pero con un acuerdo programático con VOX, que en la práctica no entra en el ejecutivo.Tampoco lo hará Ciudadanos, que votará en contra de la investidura tras obtener en Lucena sus dos únicos concejales en la provincia. Queda así el ejecutivo tras varias conversaciones "con todos los grupos políticos", como expresó Fernández a COPE tras los comicios.

Jesús López, portavoz de Ciudadanos Lucena, ha manifestado que esta misma mañana, a tan sólo un día de la sesión de investidura, "se ha roto todo tipo de acuerdo con el Partido Popular para votar a favor del nombramiento de Aurelio Fernández como nuevo alcalde de Lucena". En este sentido, López ha señalado que "han sido muchas las reuniones y las llamadas. La negociación se ha hecho tediosa y de la misma concluimos la falta de sintonía entre los propios miembros del nuevo equipo de gobierno".

Para los de Ciudadanos, el PP no ha mostrado “ideas claras, ni voluntad por llegar a un acuerdo”, llegando a sospechar un “claro intento de silenciarlos”. López, que en esta rueda de prensa estaba acompañado por la nueva concejal de la formación naranja, Purificación Joyera; ha explicado que "tras las propuestas contradictoras del Partido Popular sobre si los liberales debían o no formar parte del gobierno, fueron estos quienes presentaron una propuesta de acuerdo basada en seis puntos, entre los que resaltaban la creación de un Consejo Sectorial de Barrios, cuya presidencia, al igual que ocurriera con la mesa antiokupas, lideraría el propio Jesús López y donde se diera voz y canalizara todas las necesidades de los diferentes barrios del término municipal o la puesta en marcha de medidas programáticas, tal y como la canalización del agua de Zambra o el aumento del parque público de viviendas para alquileres sociales", han expresado.

Sin embargo, el punto discordante en la negociación se ha centrado principalmente en la negativa explícita por parte del Partido Popular, en primer lugar, de dejar firmado ningún tipo de acuerdo y en segundo lugar, por no aceptar que cuando se presente o se lleve a cabo una medida acordada con Ciudadanos, lo manifiesten públicamente, como así se ha venido haciendo anteriormente en el Ayuntamiento.

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