El ingrediente secreto del flamenquín que te ayudará a potenciar su sabor

El Flamenquín es uno de los platos más típicos y tradicionales de la cocina cordobesa. A diferencia del San Jacobo, este plato consiste en un empanado que se hace en forma de rulo envolviendo la carne con el jamón, y que originalmente no lleva queso.

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Sobre su origen, no sabemos con exactitud que fue lo que le dio su nombre, pero según cuentan algunos entendido en la gastronomía cordobesa, fue su color dorado el que le valió su denominación. Y es que su color rubio recordaba a los flamencos que llegaron a tierras cordobesas acompañando al emperador Carlos V.

Al principio, su principal ingrediente era el escalope de ternera cortado muy fino y relleno de jamón serrano y rebozado con huevo y pan rallado. Pero con el tiempo, el escalope de ternera ha sido sustituido en la mayoría de los casos por lomo de cerdo o pollo.

El ingrediente secreto para potenciar el sabor de tu flamenquín

Aunque, como todos los platos tradicionales, hay diferentes variantes que han hecho que el plato evolucione, vamos a explicar la receta original, en la que el relleno es únicamente jamón serrano.

Para ello, vamos a realizar la receta del restaurante cordobés “La Ermita de la Candelaria”, junto a su chef, Manuel Gómez Bermejo. Los ingredientes principales para este plato son:

El primer paso que debes realizar es marinar el lomo con el limón y la sal, un truco que te ayudará a potenciar el sabor de tu flamenquín. Pero debes dejarlo en su punto, ya que sino puede coger demasiado sabor o incluso, puede favorecer que la carne quede aún más seca de lo normal.

Otro de las claves que debes tener en cuenta para esta receta es que el lomo debe estar cortado en lonchas finas, de forma que al enrollar el flamenquín no quede demasiado gordo. Si esto sucede, a la hora de freírlo puede quedarte crudo por dentro y demasiado tostado por fuera.

Una vez que tenemos el lomo ya marinado, añadimos las lonchas de jamón poco curado, para que termine de hacerse durante la fritura, así como una tira muy fina de tocino fresco. Este ingrediente nos ayudará a aportar jugosidad a la receta, ya que de por sí, el lomo de cerdo suele ser una carne bastante seca.

Una vez que ya tenemos enrollada la carne, la pasamos por huevo batido y pan rallado, para garantizar un rebozado perfecto y a gusto del consumidor. En algunos casos, a esta mezcla se añade también un poco de ajo en polvo y perejil, que también dan ese toque de las frituras andaluzas.

Por último, a la hora de freirlo es necesario que el aceite no este a una temperatura muy alta, ya que podía hacerse demasiado rápido y la carne podría quedarse demasiado seca.

Presentación y acompañamiento

Este plato ofrece multitud de variedades, pero la más común suele ser acompañado de patatas fritas y mayonesa o salsa alioli. Pero también puedes presentarlo con una ensalada o con pimientos fritos.

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A la hora de presentarlo en tu plato, puedes servirlo cortado o sin cortar, eso si, procura que al cortarlo no pierda el rebozado. Y ya solo queda que pruebes en casa y nos cuentes si tus comensales han quedado sorprendidos con este tradicional plato de la gastronomía cordobesa.

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