Cinco prácticas deportivas para liberar estrés

Cada vez son más los españoles que encuentran en la práctica habitual de actividad física una salida para el estrés que nos genera nuestro ajetreado día a día. Muchas veces el ritmo de vida al que nos vemos sometidos puede repercutir de manera negativa tanto en nuestro estado físico como en nuestro estado anímico y mental.

La práctica deportiva o de cualquier otra actividad física puede ser un bálsamo con un valor casi terapéutico para nuestra salud. Pero la pregunta es ¿qué actividades físicas o deportivas son las que pueden ayudarnos a liberar tensión y estrés?

Según expertos de Gympass, hay cinco alternativas que nos pueden ayudar a liberar ese estrés que tanto pesa en la mochila de nuestro quehacer diario.

Cardio

Sin duda correr está de moda. Es uno de los deportes básicos y su práctica, en la medida de nuestras posibilidades y estado físico, no solo te ayudará a mantenerte en forma, sino que además, colaborará a liberar ese estrés que suponen las preocupaciones de la vida. Cabe decir que el ejercicio cardiosaludable no es solo correr: hacer sentadillas, saltar a la comba o el ciclismo son alternativas igual de interesantes y positivas.

Salir a correr, un paseo en MTB o hacer un poco de bici estática te ayudará a relajarte, ya que cualquier forma de cardio liberará endorfinas y serotonina en nuestro cuerpo, hormonas que contribuyen a nuestro bienestar.

Por último, los beneficios del cardio son en cualquier caso los mismos: quema de calorías, mejora de la tonificación del cuerpo, entrenamiento del sistema cardiovascular y mejora de la respiración y del sistema inmune.

Boxeo

Si correr está de moda, el boxeo no se queda atrás. El boxeo se ha convertido en toda una tendencia, en la última moda para liberar tensiones y descargar adrenalina. Aparte de ser un deporte aeróbico, el boxeo es un deporte muy completo y su práctica ayuda a ganar masa muscular y estar en forma ya que trabaja todo el cuerpo de los pies a la cabeza, mejora la velocidad mental y la toma de decisiones.

Con el boxeo se combate el estrés y se mejora el sistema inmunológico. Es una buena opción también para fortalecer la coordinación, al implicar las manos y las vista, mejorando nuestros reflejos. Es la práctica perfecta para deshacerte de la tensión y el estrés del día a día.

Natación

Si lo tuyo no es correr o montar en bici, la natación es una buena alternativa para aquellos que quieran hacer actividad física y rehúyan de calzarse unas zapatillas de runnig, enfundarse un culotte de ciclismo o pasar unas horas en el GYM. Los beneficios de practicar natación son múltiples, ya que el agua pesa menos y las articulaciones del cuerpo tienen que lidiar con menos presión y sobrecarga que en otro tipo de deportes. Destacan el aumento de flexibilidad y elasticidad, el fortalecimiento de todos los músculos, sobre todo de la espalda, el alivio de enfermedades crónicas como el asma o la diabetes, y la ayuda que presta al sistema respiratorio y al aumento de la capacidad pulmonar.

Al sumergirnos en el agua, hacemos uso de todas nuestras extremidades, articulaciones y grupos musculares, y concentrarnos al mismo tiempo en la regulación de nuestra respiración. En consecuencia, lograremos fatigar y desestresar todo el cuerpo. La natación es un deporte muy completo, pero no produce impacto en los huesos o articulaciones, lo que lo hace idóneo para quienes tengan alguna lesión o no puedan realizar grandes esfuerzos.

Yoga

El yoga es una práctica milenaria que busca el equilibrio entre la mente y el cuerpo. Expertos en yoga aseguran que es también una potente herramienta de gestión emocional. El yoga, al ayudarnos a controlar nuestra propia respiración, nos ayudará a superar la ansiedad.

Entre sus beneficios cabe destacar que aumenta la capacidad del sueño y ayuda a dormir mejor, alivia los dolores crónicos y posturales, quema calorias y puede ayudar a hacer frente al miedo, la tristeza y a potenciar actitudes positivas que, sin duda, dejarán a un lado las preocupaciones. En definitiva, ayuda a conseguir un bienestar tanto físico como mental.

Bailar

Bailar es una fantástica opción para liberar estrés y a la vez mantenernos en forma. Bailar no entiende de edades, puede practicarlo prácticamente cualquier persona. Además de ser sumamente divertido, el baile tiene múltiples beneficios absolutamente recomendables para nuestra salud, tanto física como mental.

Salsa, zumba, danza, flamenco, merengue, bachata, baile moderno, baile clásico… cualquier modalidad es buena para aliviar el estrés e incluso olvidarnos de él. Si a esto le sumamos que podemos realizarla en grupo y emplear para conocer nuevas personas, cuanto antes pruebes su práctica, mejor que mejor..

Como apuntaba anteriormente, sus beneficios son múltiples, y, al igual que el boxeo, ayuda a la salud cardiovascular, mejora el equilibrio y la fuerza y hasta aumenta el rendimiento cognitivo. Distintos estudios revelan que las áreas del cerebro que controlan la memoria y las habilidades mejoran con el baile. También ayuda a mejorar el estado de ánimo, reduciendo el estrés y disminuyendo los síntomas de la ansiedad y la depresión, además de aumentar la autoestima.