Unicaja, un clásico del baloncesto europeo

En Bélgica, en la ciudad de Ostende a orillas del Mar del Norte, Unicaja comienza la defensa del título de la Basketball Champions League que ganó brillantemente en Belgrado la temporada pasada. 

31 equipos aspiran en este curso a arrebatarle a Unicaja su condición de campeón continental. En esta novena edición de la competición, equipos como Lenovo Tenerife, UCAM Murcia, Hapoel Holon, Galatasaray, AEK de Atenas o Lietuvos Rytas se presentan como los grandes rivales a los que tendrá que hacer frente Unicaja para retener el título, porque como reconoce Jontan Barreiro, el Unicaja se presenta en esta edición de la BCL como el gran rival a batir: "Ahora ya empezamos con los viajes. Nos hace especial ilusión volver a jugar la BCL, un título que ya ganamos el año pasado, así que vamos a ser el rival a batir. Jugamos contra el Filou Oostende, un equipo que perdió su último partido en casa, con lo cual ahora va a volver con ganas delante de su gente, así que, después de un viaje largo, es complicado. Sabemos que hay que sacar los encuentros fuera de casa, que son importantes, y eso intentaremos hacer"

nunca ganó en ostende

Para esta primera jornada, el Ostende se presenta como primer rival. Sobre el papel Unicaja es muy superior al campeón de las últimas 13 ediciones de la competición en la que compiten equipos belgas y de Países Bajos. Pero no debe confiarse Unicaja. Bélgica es un país donde históricamente ha consumado decepciones inesperadas. La última sin ir más lejos frente a Ostende en 2022, donde Unicaja cayó por 18 puntos haciendo un ridículo espantoso y encajando 35 puntos de Levi Randolph. Como curiosidad, ya era entrenador Ibon Navarro y se produjo el debut de Mario Sain Supery. Alberto Díaz y Barreiro también sufrieron esa derrota. De hecho, Unicaja nunca le ha ganado a Ostende en sus dos visitas a la ciudad flamenca. En la primera ocasión, en 1998 en la Copa Korac, también se llevó un rejón importante. El equipo entrenado por Pedro Ramírez perdío por 19 puntos. Ni siquiera los 24 puntos de Babkov, ni los 17 de Keny Miller pudieron evitar la hecatombe.

También en Charleroi en Euroliga o en Mons, en la Copa Korac, Unicaja se ha traído derrotas inesperadas y con las que nadie contaba. Y es que, como reconoce Barreiro, jugar fuera de casa en Europa se hace duro: "Jugar fuera de casa se hace duro, pero al final tenemos la suerte de ser muchos jugadores, ir rotando y llegar bien físicamente a los encuentros que jugamos fuera”.

TRIGÉSIMA SEGUNDA PARTICIPACIÓN

Unicaja ya es todo un clásico en Europa, desde 1995 lleva disputando competiciones europeas de manera ininterrumpida. Esta será la trigésima segunda ocasión que Unicaja dispute un partido europeo repartidos entre Euroliga, Copa Korac, Eurocup y BCL. Fue precisamente en Bélgica en 1989 donde disputó su primer partido ante el Trane Castors, curiosamente en Bélgica se ganó, pero en Málaga se perdió y cayó eliminado. Manolo Rubia era el delegado del equipo y recuerda así el primer viaje: "Hace 34 años de aquello, recuerdo la ciudad y pasear por las calles de Braine L'Alleud. Estar con Paco Rengel, con Juan Amat, que era nuestro fisio. Ganamos el partido allí, pero no pudimos pasar".

A las ocho de la tarde, Unicaja comienza el camino, para, ojalá, lograr su cuarto título europeo.