El Archivo Histórico Provincial analiza la vida de malagueños anónimos vinculados a América en el siglo XVII

El Archivo Histórico Provincial de Málaga, dependiente de la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico, analiza en su nueva muestra del 'Documento del mes' la vida de distintos malagueños anónimos del siglo XVII que tuvieron parte de su vida vinculada a América.

Así, bajo el título 'Los ausentes de Indias. Documentos del siglo XVII, testimonio de una separación', el Archivo Histórico Provincial expone varios documentos que reflejan como las ausencias en América obligaban a elaborar poderes notariales que permitieran a los familiares que residían en Málaga ejercer sus derechos sobre herencias, pleitos y testamentos, según ha informado la delegada territorial de Cultura y Patrimonio Histórico, Carmen Casero.

Casero ha explicado que la muestra hace hincapié en el papel de las mujeres, ya que entre los expedicionarios a América la mayoría eran hombres y fueron las mujeres las que, en su ausencia, tuvieron que manejar asuntos de todo tipo. De igual modo, en los textos explicativos que acompañan a la muestra se analiza la crisis del siglo XVII en España, la influencia en la vida española de los territorios ultramarinos y la sociedad colonial, así como el papel de la mujer en el sostenimiento del patrimonio familiar.

En este sentido, se explica que "maridos, padres e hijos emigraron a Indias, están ausentes como se refleja en los documentos, y las mujeres que se quedan en Málaga han de gestionar sus bienes, defender sus dotes y arras y las herencias de sus hijos, así como pleitear por recibir su estatus". La exposición muestra dos poderes notariales expedidos en Málaga en 1647 y 1680, que otorgan dos ausentes para que les representen en distintos pleitos, mientras que un tercer documento expuesto, de 1648, es el testamento de una mujer malagueña.

Por su parte, la directora del Archivo Histórico Provincial, Esther Cruces, ha remarcado que en el siglo XVII un documento formalmente expedido por un escribano público era fundamental para cualquier acto que buscara tener efectos económicos, sociales, jurídicos o judiciales y, por lo tanto, acudir a una escribanía pública era una necesidad para quienes quisieran defender sus intereses, realizar transacciones o reclamar su defensa en un tribunal. El documento empleado con frecuencia para que todo ello pudiera ser llevado a cabo era el poder y, a través de ellos, los hombres que se iban a Indias dejaban sus intereses respaldados y bien gestionados, apoderando a familiares.

VIUDAS

También en la documentación notarial destaca el elevado número de documentos realizados por viudas, en comparación con el de otras mujeres. La viudez concedía un grado de libertad desconocido por la mujer casada, ya que una viuda entraba en posesión de su dote y arras, así como de la mitad de los bienes del marido o de los gananciales y podía ostentar la tutela de los hijos y nietos y de la administración de sus bienes. Debido a los diversos períodos de alta mortandad acaecidos a lo largo del siglo XVII fueron muchas las viudas. Como ejemplo, en 1646 el municipio de Álora tenía 158 vecinos, de los cuales 29 eran viudas.