Miles de personas dan el último adiós a María Jiménez

Los restos mortales de María Jiménez se encuentran ya en el Ayuntamiento de Sevilla donde se ha instalado la capilla ardiente para que los ciudadanos puedan darle el último adiós a la cantante sevillana.

El coche fúnebre ha accedido a través de la Plaza de San Francisco donde ha sido recibido por la corporación municipal. La capilla ardiente se ha instalado en el Salón del Apeadero y entre los detalles que se han colocado para rendirle un último homenaje se encuentran las plumas de pavo real, que se hicieron famosas en sus estilismos porque con ellas que apareció con un tocado que ella misma había diseñado.

La despedida a esta artista única y con personalidad propia se va a prolongar a lo largo de toda la jornada. La capilla ardiente va a permanecer abierta hasta las diez de la noche y mañana viernes el horario será de ocho a diez de la mañana.

Después la familia ha confirmado que cumplirá su deseo de ser paseada en un coche de caballo por el barrio de Triana y se celebrará una Misa funeral en la capilla de Santa Ana.

María Jiménez fallecía esta madrugada y su muerte era confirmada con un escrito que firmaba su hijo Alejandro. En ese breve texto decía de su madre "con profunda tristeza y dolor en nuestros corazones, despedimos hoy a María Jiménez, mujer amada y respetada por su compromiso inquebrantable con su familia, amigos, y admiradores. Un espíritu indomable, una personalidad arrolladora, una mujer fuerte y valiente que lucho contra todas las adversidades más allá de lo imaginable".

El alcalde de Sevilla José Luis Sanz ha anunciado en COPE Sevilla que María Jiménez contará con una calle a su nombre en la ciudad. Se está estudiando la posibilidad que sea en las proximidades de la calle Betis en Triana, el barrio que la vio nacer hace 73 años.