Comienza una Semana Santa sin procesiones en las calles… ¿y qué?

Hoy no habrá en las casas de los sevillanos ese nerviosismo por levantarse temprano para ver cómo de azul es el cielo de este Domingo de Ramos. Ni tampoco habrá ajetreo en las casas de hermandad de las cofradías del día desde temprano. No habrá olor a incienso saliendo por los zaguanes de las casas. Ni siquiera huele ya a azahar por las calles de la ciudad aunque los naranjos están a rebosar, sólo huele a… lejía.

No habrá hoy tampoco bares y restaurantes a rebosar. Ni pasos expuestos en iglesias y capillas, bueno… es que ni tan siquiera habrá iglesias y capillas abiertas para poder visitar. Ni ese constante hormigueo de personas con rumbo a la fe según Sevilla.

Tras una Cuaresma que se rompió a la mitad, hoy se nos abre una Semana Santa jamás imaginada por nadie ni en la peor de sus pesadillas… Ni tan siquiera en la taquillera imaginación de Mateo Gil y su ‘Nadie conoce a nadie’, que protagonizase Eduardo Noriega al borde del nuevo milenio, algo así hubiese tenido cabida.

Esta es la inesperada primavera que este año se ha presentado en esta híspalis confinada. Una ciudad que nada tiene que ver con esa que el autor Miguel Zarza plasmó en la letra de aquella “Sevilla espiritual”, sevillana a la que puso música ‘Juanini’ y popularizaron, allá por 1994, ‘Los Marismeños’.

Nada es lo que debiera ser. Todo ha cambiado de golpe y porrazo y, quizás, eso dicen algunos, para siempre. No lo sé… El tiempo lo dirá.

Todo ante nosotros es, hoy por hoy, un auténtico mar de dudas y preocupaciones, de incertidumbres y anhelos, de sueños rotos y sueños por cumplir.

Y, tal es la gravedad de la situación, que poco importa ya si hay o no procesiones este año, aunque algunos 'frikicofrades' continúen dándode vueltas a procesiones en septiembre, en noviembre o cuando sea. Ahora, lo único que importante es conocer, a eso de la hora del Ángelus, que en el nuevo ‘parte de guerra’ comenzamos a ganar la batalla frente a la pandemia. Y es que con casi 12.000 de los nuestros que se han marchado antes de tiempo, no creo que los cofrades estemos ahora como para pensar en pasos en la calle.

Es el momento de, como dijo el profeta Joel, “rasgarnos los corazones y no las vestiduras”.

Esta Semana Santa se vivirá, por tanto, en la intimidad de los hogares. Sin ninguna rimbombancia de cornetas y bullas. Y nos servirá de mucho, estoy convencido. Entre otras cosas, para que los cofrades nos paremos a mirar a nuestros alrededor; analicemos lo que estábamos haciendo, tanto lo bueno, que es mucho, como malo, que también lo hay; y podemos llegar a esa conversión que nos pide el Señor en estos días.

INDICACIONES DE LA ARCHIDIÓCESIS

Para ello, desde la Archidiócesis de Sevilla, se han dado una serie de recomendaciones e indicaciones para poder vivir  “estas tristísimas circunstancias con esperanza, y que lo que perdamos en espectáculo y en belleza, lo ganemos en intensidad”, como ha señalado el propio Arzobispo, Monseñor Juan José Asenjo. 

Y es que debemos de tener en cuenta que, por encima la suspensión de las estaciones de penitencia de las numerosísimas cofradías presentes en la Archidiócesis hispalense, está la imposibilidad para los cristianos de participar presencialmente en las liturgias propias de estos días.

Por ello, desde el Arzobispado hispalense se ha hecho el mayor esfuerzo posible para que el confinamiento de la población no sea un hándicap para rememorar la Pasión, Muerte y Resurrección del Señor.

De este modo, y entre otras coas, la Archidiócesis de Sevilla, a través de su Delegación diocesana de Liturgia, ha elaborado unos subsidios litúrgicos para vivir esta Semana Santa de forma familiar o personal desde casa y los cuales se pueden encontrar y descargar en su página web: www.archisevilla.org. Cada día (Domingo de Ramos, Jueves y Viernes Santo, Vigilia Pascual y Domingo de Resurrección) cuanta con una introducción y con indicaciones para seguir la liturgia fácilmente desde casa.

LA SEMANA SANTA ‘VIRTUAL’ DEL CONSEJO DE HERMANDADES

El Consejo de Hermandades y Cofradías de Sevilla ha preparado, a través de su equipo de comunicación, tres acciones para llevar a cabo una Semana Santa que han denominado como ‘virtual’ y que llegará a través de las redes sociales.

Por todo esto decía que hoy comienza una Semana Santa sin procesiones en las calles… ¿y qué? El confinamiento de la población no debe ser un hándicap para rememorar la Pasión, Muerte y Resurrección del Señor en la intimidad de nuestras casas.

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