"Nos morimos de sed": SOS desde un pequeño pueblo de Teruel

El problema de la sequía se agrava cada vez más en la provincia de Teruel. Ha sido la zona de Aragón donde menos ha llovido durante este año y eso ahora, se está notando en muchos pueblos. La situación se acentúa aún más con el aumento de la población en verano. Hay municipios que no dan abasto y los bomberos de la Diputación Provincial de Teruel deben suministrarles agua. La cifra es llamativa y preocupante: 438.000 litros de agua se han tenido que llevar a varios pueblos de Teruel en las últimas 48 horas.

Si nos remontamos al pasado viernes tuvieron que distribuirse otros 188.000 litros y el número de municipios que necesitan que los Bomberos les lleven agua se eleva ya a 12. Los últimos en necesitar agua han sido Torrijas y Albentosa. Se suman a Arens de Lledó, Nueros, Lanzuela, Valverde, Badenas, El Paul, Aguilar del Alfambra, Mirambel, Libros y Cantavieja.

Las prohibiciones de riegos ya se hacen notar y en la Cuenca del Matarraña se han impuesto ya prohibiciones debido a que el embalse de Pena está tan solo al 29% de su capacidad. Los agricultores también lo están pasando mal y la campaña de cereal está perdida.

Cantavieja, uno de los municipios más afectados por la sequía

La llegada de los camiones de los Bomberos de la DPT es constante en la localidad de Cantavieja. Por ejemplo, este mismo jueves les han llevado 120.000 litros de agua y apenas 24 horas antes ya les habían tenido que abastecer con otros 48.000 litros. De momento, no se han tenido que realizar cortes de agua en las casas, pero las piscinas sí están cerradas durante este verano.

"No tenemos agua y sin agua, no hay vida para nadie"

En el municipio tienen una capacidad de almacenaje de agua de 7 millones de litros tanto para consumo humano como ganadero. En estos momentos, ese almacenaje es de solo 400.000 litros. Además de sus dos manantiales (el Agua la Villa y La Bujera), uno está totalmente seco y el otro a un 10%.

El consumo durante el verano va a más con los vecinos que acuden a sus segundas residencias, el turismo rural y el aumento de la actividad en la hostelería. "Tenemos un manantial que nos proporciona 200.000 litros de agua al día, pero en el municipio consumimos 350.000 litros de agua de boca diariamente. Esa diferencia es la que deben venir a aportarnos los camiones de Bomberos de la Diputación Provincial. Y para las explotaciones ganaderas, somos el propio Ayuntamiento quien proporciona agua con un camión de 20.000 litros. Esto lo llevamos haciendo desde hace un mes y medio", nos cuenta en COPE Ricardo Altabás, alcalde de Cantavieja.

De esta forma, el Ayuntamiento abastece a 40 explotaciones de ovino, porcino y vacuno. "Esta es una situación que no habíamos vivido jamás. Siempre hemos sido un pueblo rico en agua y esta situación es un drama tanto por el agua de boca como para las explotaciones ganaderas que son un pilar básico para nuestra economía. Hemos garantizado el consumo de agua de boca a todo el pueblo", afirma Altabás en COPE.