Pablo Carlier, responsable de Google: “La IA lleva décadas en nuestras vidas pero no éramos conscientes”

¿Sabes cuántas veces utilizas la Inteligencia Artificial al día? Muchas veces la usamos sin ser siquiera conscientes de ello. De hecho, "lleva décadas en nuestras vidas, en nuestros bolsillos, cuando usamos Google Maps", asegura el responsable de análisis de datos de Google Cloud para España y Portugal, Pablo Carlier.

Es uno de los ponentes que estos días participa en el Congreso The Wave, el evento tecnológico más importante que se está desarrollando estos días en Zaragoza, con más de 10.000 personas inscritas y más de 250 ponentes nacionales e internacionales. Las cifras triplican en esta segunda edición las del año anterior.

Carlier ha pasado también por los micrófonos de COPE Zaragoza, donde ha defendido el valor de la IA para empresas y particulares. "Somos más consientes de que existe y debemos apoyarnos en ella y ver todo lo que puede hacer por nosotros, que es increíble", sostiene.

¿HASTA DÓNDE PODEMOS LLEGAR?

Para utilizar bien la IA lo primero que hace falta es "confianza en ella" y para ello “es fundamental usar la fuente de datos adecuada para hacer que brille en todas sus capacidades, ya sea generar textos, vídeos o imágenes; o hablar con ella”

Pero para Cardiel también es imprescindible tener "imaginación y amplitud de miras, con la curiosidad de estar ante una de las herramientas más importantes de la historia y con la ambición de querer enfrentarla a los principales problemas que tenemos como especie".

Para Google, ha llegado el momento de que "cualquiera pueda beneficiarse de la inversión en esta tecnología que ha hecho la compañía en las últimas décadas" y de que "esa innovación que usa todo el mundo llegue al tejido empresarial". Eso sí, con una canalización adecuada para que "puedan usarla con seguridad, confianza, cumpliendo las normas y controlando los riesgos", señala.

Sobre las consecuencias que puede tener sobre nuestras vidas y el mercado laboral, Cardiel apunta a que "vamos a tener que acostumbrarnos a que hay tareas en las que puede ayudarnos y otras tareas que podremos delegarle totalmente". "El futuro es brillante", concluye.