Un grupo de investigadores de Gijón buscarán combatir tumores muy agresivos con células madre del útero
El equipo del hospital de Jove liderado por Francisco Vizoso y Noemí Eiró ha recibido una beca del Instituto de Salud Carlos III para ahondar en el trabajo de lucha contra el cáncer que viene realizando en la última década
Asturias - Publicado el - Actualizado
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Utilizar células madre del cérvix uterino para combatir tumores muy agresivos. Es, en resumen, el objetivo de una nueva investigación contra el cáncer que van a llevar a cabo, durante los próximos 3 años, los investigadores del hospital de Jove, en Gijón. Van a continuar, así, el trabajo que ha venido realizando, en la última década, el equipo encabezado por el doctor Francisco Vizoso.
Este proyecto ha recibido una beca de 198.750 euros del Instituto de Salud Carlos III y estará liderado, además de por Vizoso -Hijo Adoptivo de Gijón por su contribución a la investigación oncológica-, por la investigadora Noemí Eiró. Ese dinero financiará un plan que busca lograr, en tres años, una nueva estrategia terapéutica para tratar el cáncer de mama triple negativo, el de páncreas y el meduloblastoma, un tipo de tumor cerebral infantil.
"Estamos notando un incremento de casos y la previsión no va a mejor", advierte Eiró, que explica que, "a pesar de los avances en el diagnóstico y el tratamiento, siguen siendo necesarias nuevas alternativas terapéuticas".
Durante los próximos tres años, ahondarán en su trabajo con las células madre y la sustancia biológica que segregan -secretoma-, que contiene proteínas y material genético, que "vamos a usar como terapia y utilizar el que mejor se adapte a cada tipo de cáncer".
Efecto sinérgico con quimioterapia
El trabajo profundizará en los datos recabados -y publicados en revistas especializadas- por el equipo investigador en los últimos años. "Nosotros ya hemos visto, en el cáncer de mama triple negativo -el más agresivo de los tres-, que el secretoma tiene una actividad antiproliferativa para que las células tumorales no crezcan y no invadan".
De esta manera, "hemos podido identificar un efecto sinérgico con la quimioterapia", explica Eiró. De hecho, "si unimos el tratamiento de quimio con el secretoma, podemos potenciar el efecto de la quimioterapia".
Incluso, "hemos realizado un ensayo con ratones en el que, cultivando células madre del cérvix con dosis sub letales -que no hagan daño a esas células- con el secretoma, se puede disminuir la dosis de quimioterapia, pero potenciando su efecto".