De Australia al HUCA: la nueva técnica pionera para pacientes amputados

El HUCA acaba de traerse a Asturias un avance llamado a cambiar la vida de los pacientes amputados que sean candidatos. Se trata de la osteointegración. Y va dirigida a amputaciones traumáticas por encima de la rodilla. Llega para sustituir al implante tradicional, al típico 'muñón' y permite mejorar la calidad de vida del paciente de manera muy notable: "Pasa de 40% de funcionalidad al 90% o al 100%" afirma David Alonso, traumatólogo que realizó la intervención. Es una técnica que nace en Australia y que en España solamente la ha utilizado desde 2022 el Hospital Vall d'Hebron en Barcelona.

Un gijonés de 43 años con malformaciones congénitas ha sido el paciente en el que se ha realizado esta técnica. Y es que no vale para cualquier paciente. Al llevar prácticamente toda su vida con implantes tradicionales, ya contaba con "muchos problemas" explica el propio David Alonso: "Tenía muchas infecciones de repetición, dolores con las cicatrices, problemas con el encaje... Era un problema que se estaba cronificando". Cuando los implantes tradicionales dan este tipo de problemas, es cuando esta solución entra en juego: "El punto de partida es cuando la prótesis tradicional da problemas reiterados. De primeras, la intención es hacer la prótesis habitual, porque no va a dar problemas en el período inmediato".

¿Cómo está el paciente?

Y dos meses después de la operación, la rehabilitación de este paciente es inmejorable, afirma José Antonio Fidalgo, jefe de la Sección de Prótesis: "Está ya con la prótesis montada y haciendo carga con la misma con dos bastones. Está muy contento. Nos queda terreno por delante en la rehabilitación pero está muy satisfecho. Era lo que esperaba. Ve que las demandas que tenía se van cubriendo".

Múltiples ventajas

La lista de ventajas para el paciente que supone es amplia, empezando por algo clave, la calidad de vida: "La mejoría es de más de 50 puntos. De un paciente que está a un 40/45% de funcionalidad pasa a un 90/100%. Vuelve a salir de casa, vuelve a tener vida social, caminan más tiempo, se ponen y se quitan la prótesis en la mitad de tiempo...".

Técnicamente es un proceso complejo: "Es una prótesis que a través de la piel conecta la pierna artificial del paciente directamente con su fémur. La conexión con el esqueleto del paciente es una alternativa excelente".

Siguientes avances

El HUCA coloca 90 prótesis al año. Una decena de esos pacientes serían candidatos a esta pionera técnica. Aunque hay una serie de requisitos que cumplir, lo que deja la lista de posibles candidatos en "unos cuatro o cinco". El HUCA ya piensa también en una prótesis de este tipo para el caso de un paciente de Avilés de mediana edad en el brazo, algo todavía más complejo. El proceso de autorización con el hospital australiano que cuenta con la patente ya está en marcha.