La historia de dos ovetenses que empezó con un dibujo y acabó junto al Rey: "Prepara las maletas"

No es una frase cualquiera. Es el principio de un viaje inesperado, con una servilleta, un recuerdo y una amistad como punto de partida

Alba y Paula
00:00
COPE Asturias

 Paula y Alba, dos amigas con discapacidad

Yolanda Montero

Oviedo - Publicado el

4 min lectura

La vida da giros inesperados y, a veces, es en los lugares menos pensados donde nacen las conexiones más profundas. Un hospital puede ser mucho más que un espacio de recuperación: también puede convertirse en punto de encuentro. Así comienzan algunas historias que merecen ser contadas, como la de dos jóvenes unidas por el arte y la amistad.

Se llaman Paula y Alba, son amigas, son artistas y se conocieron en uno de los contextos más difíciles: en la rehabilitación del Hospital Universitario Central de Asturias, en Oviedo. Desde entonces, no se han separado. Su historia, de superación, creatividad y amistad, es tan potente como sus obras. Ambas tienen discapacidad. Ambas han encontrado en el arte una vía para sanar, expresarse y vivir con más fuerza. Y juntas han participado en un concurso de pintura en el que no solo han mostrado su talento, sino también su forma única de ver la vida.

Cuadro pintado por Alba

COPE Asturias

Cuadro pintado por Alba

"Me dejó en silla de ruedas un fallo médico"

Paula tiene una discapacidad del 79%, en su caso de tipo motora. Todo comenzó, cuenta, con una intervención quirúrgica que no salió bien. “Un fallo médico en una cirugía me dejó en silla de ruedas. Y dos años y medio después, y tras diez operaciones, aquí seguimos”. Lo dice con determinación, con fuerza, con la sonrisa de quien ha tenido que reinventarse. Y en ese proceso, el arte fue decisivo.

Cumplo ahora 30 meses desde la primera cirugía. Y lo único que me hacía salir de casa era ir a pintar”, recuerda. Encontró un taller cerca de su casa. “Hicieron incluso una rampa para que pudiera entrar. Eso no lo hacen en muchos sitios”. La pintura fue su salvavidas. Su manera de salir de la depresión. “Antes tenía un negocio, no paraba quieta. Nunca tenía tiempo para pintar. Y mi madre me regaló una tablet digital para entretenerme mientras estaba en cama. Ahí empezó todo”.

Dibujo realizado por Paula

COPE Asturias

Dibujo realizado por Paula

"El arte me llevó hasta el Rey"

Alba, por su parte, tiene una discapacidad intelectual. Su historia con el arte empieza muy pronto, también por un vínculo familiar fuerte: su bisabuelo Pepe. “Me enseñó a dibujar desde los cuatro años. Siempre que comíamos, dibujaba rosas en el mantel. Y a mí me enseñó a hacer lo mismo. Cuando falleció, hace dos años, hice un dibujo en su recuerdo. Siempre imagino que hay una estrella muy brillante arriba, y esa estrella es él”.

Pintar, dice, le permite entrar en un mundo “mágico”, donde se siente libre. “Me relaja un montón. Me olvido de todo. Puedo estar dibujando a las diez de la noche y de repente son las tantas y sigo”. Y esa pasión la ha llevado muy lejos. Literalmente. Hasta Madrid. Y hasta el mismísimo Rey.

“Hice un vídeo para YouTube con uno de mis dibujos, y un día me llamaron para decirme que iba a conocer al Rey de España. Pensé que era una broma. Mi profesora estaba llorando de emoción. Llamamos a mi madre y le dije: ‘Prepara las maletas, que vamos a Madrid’”. El encuentro fue emocionante. “El Rey fue muy majo. Rompió el protocolo, habló conmigo, tengo una foto con él. Me dijo: ‘No dejes el arte, sigue adelante’. Y a mi madre le dijo: ‘Tu hija tiene un talento, que no lo deje nunca’. Mi madre lloró”.

Artista participando en el concurso de dibujo de los centros Sociales de Oviedo

COPE Asturias

Artista participando en el concurso de dibujo de los centros Sociales de Oviedo

"Dibujaba en servilletas mientras esperaba"

La amistad entre Paula y Alba empezó en los pasillos del HUCA. Y no fue una casualidad que se reconocieran como artistas. “Vi a Alba dibujando en una servilleta mientras esperaba. Lo hacía para los fisios que nos trataban”, recuerda Paula. “Me llamó mucho la atención. Fue como: ‘¿Qué haces?’. Y así empezamos a hablar”.

Alba lo recuerda también con cariño. “Ella me preguntó mi nombre, yo le dije Alba, y ella Paula. Le enseñé el dibujo y aunque no era el mejor, le gustó”. Desde entonces, han compartido risas, pinceles, emociones y hasta concursos. Alba confiesa entre risas: “Yo vine al concurso porque Paula me animó. Me dijo: ‘Si tú vas, yo voy’. Y aquí estamos, las dos, mano a mano”.

Dos jóvemes pintando

COPE Asturias

Dos jóvemes pintando

Para Paula, el arte ha sido una tabla de salvación. “Ahora cada martes voy al taller a pintar. Ya no es un día más de rehabilitación, es un día que espero con ganas. Me ha cambiado la vida”. Y no duda en reivindicar que las condiciones para participar en eventos como estos sean más inclusivas. “Sería genial que se adaptaran mejor a las personas con discapacidad. Estaría muy bien”.

Alba lo resume así: “Gracias a mi bisabuelo descubrí este mundo. Y el arte me lleva a otro lugar, me permite expresar todo lo que siento. Es algo que me hace muy feliz”. Su historia, la de las dos, es un ejemplo claro de cómo el arte puede curar, conectar y transformar. No solo han encontrado una vía para superar momentos difíciles, sino que han encontrado algo más valioso: una amiga con la que compartir el camino.

Escucha en directo

En Directo COPE OVIEDO

COPE OVIEDO

Programas

Último boletín

17:00H | 14 ABR 2025 | BOLETÍN