Este es el menú de la Cocina Económica que ha sobrevivido 137 años y se sirve este sábado en Oviedo
Un libro sobre la historia de la capital asturiana revela cuál fue el primer menú que se sirvió en el edificio de la Plaza de San Miguel, el primer emplazamiento de esta institución, que abrió sus puertas en 1888

Cocinera preparando el menú en la Cocina Económica de Oviedo
Oviedo - Publicado el
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Oviedo celebra este sábado el 137 aniversario de la Cocina Económica, una institución centenaria que forma parte del alma solidaria de la ciudad. Fundada en 1888 para dar respuesta al hambre y la pobreza, la efeméride se conmemora este año de una manera muy especial: recuperando el menú original con el que se sirvió por primera vez un plato caliente en sus instalaciones. Será fabes, patatas y tocino, el mismo que aquel 22 de marzo de 1888 alimentó por primera vez a los más necesitados.
David Estévez Villalón, historiador e investigador ovetense, ha sido quien ha recuperado este dato, tras bucear en la prensa de la época y documentarlo en su libro “Leyendas e historias singulares de Oviedo”. En una entrevista en COPE, ha contado que todo comenzó con una denuncia social. “En febrero de 1888, el médico Arturo Álvarez Buylla alzó la voz en el casino de Oviedo sobre la grave situación de pobreza y hambre que sufría buena parte de la población. Fue entonces cuando se planteó crear una institución capaz de paliar esa necesidad de forma organizada y digna”, explica.
Aquel gesto fue el germen de una cadena de solidaridad que cristalizó en lo que hoy conocemos como Cocina Económica. Su primera sede estuvo en la Plaza de San Miguel, donde el 22 de marzo se realizó una prueba con el famoso menú de fabes, patatas y tocino. Al día siguiente, como era viernes de Cuaresma, se sirvió bacalao con arroz y garbanzos. “Las pruebas salieron bien y el 3 de abril se inauguró oficialmente, con la bendición del obispo incluida”, detalla Estévez.

Placa identificativade la Cocina Económica de Oviedo
Cuatro sedes
La Cocina Económica no siempre estuvo donde está hoy. A lo largo de su historia ha tenido cuatro sedes distintas, algo que no todos sabían hasta la publicación de este libro. Tras su paso inicial por la Plaza de San Miguel, se trasladó a la actual Corrada del Obispo (antigua Plaza Álvarez Acevedo), donde compartía entorno con la tienda-asilo en la que se compraban los bonos para acceder a las comidas. Posteriormente, se trasladó a la calle Quintana, donde se mantuvo casi medio siglo hasta su ubicación definitiva, en la calle San Vicente, donde continúa en activo.
Estévez subraya que desde el principio se trató de ofrecer una “cocina transparente”, visible para todos, como garantía de calidad y también como forma de dignificar a quienes acudían a ella. “No se trataba solo de dar comida, sino de hacerlo con respeto. Había obreros, braceros y personas que trabajaban, pero no llegaban a fin de mes. Y también estaban los llamados ‘pobres vergonzantes’, personas que no querían verse pidiendo limosna”, señala.

Cocineros trabajando en la Cocina Económica de Oviedo
Una labor que nunca se detuvo
La Cocina Económica ha sido testigo de guerras, crisis, pandemias y cambios sociales. Pero nunca cerró sus puertas. Ni siquiera en los momentos más difíciles. “Ni la Guerra Civil ni la pandemia de la COVID pudieron con ella. Eso es algo que merece ser reconocido, porque no hay muchas instituciones que puedan decir lo mismo”, destaca Estévez.
En la actualidad, son las Hermanitas de los Pobres quienes gestionan la institución, manteniendo viva la misión original con la misma entrega y compromiso. El centro no solo da comidas, sino también desayunos y cenas, y ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos sin perder su esencia.

Entrada de la Cocina Económica de Oviedo
“La Cocina Económica es un ejemplo de solidaridad, de compromiso constante con quienes más lo necesitan. Y lo ha sido durante 137 años. Eso no es solo historia: es orgullo de ciudad”, afirma el autor del libro.
Este sábado, el aniversario se celebra con el mismo espíritu con el que nació: abriendo las puertas, sirviendo comida caliente y mirando al futuro sin olvidar de dónde viene. Porque si algo ha demostrado la Cocina Económica de Oviedo, es que nada ni nadie ha podido con ella. Ni lo hará.
137 años después, el mismo menú en la mesa
137 años después, el mismo menú vuelve a ponerse sobre la mesa de la Cocina Económica de Oviedo. Como homenaje a sus orígenes, este sábado se servirán las mismas recetas que en 1888, cuando abrió sus puertas por primera vez en su antigua sede de la Plaza de San Miguel. Hoy, desde su ubicación actual en la calle San Vicente, la institución mantiene intacta su esencia: dar de comer con dignidad a quien lo necesita. Fabes, patatas y tocino vuelven a salir de sus fogones