De proyectiles a ciberseguridad, así crece la industria de Defensa en Asturias

La vinculación de Asturias con la industria de Defensa no es nueva. La Fábrica de Armas de Trubia, donde hoy se producen los blindados más modernos para el ejército de Tierra, los 8x8 Dragón, echó a andar a finales del siglo XVIII, y del XIX data la viaja Fabrica de la Vega, hoy cerrada.

Santa Bárbara, hoy integrada en la multinacional General Dynamics, es la empresa más veterana y conocida, pero el sector de Defensa en Asturias es hoy más, mucho más. La Asociación Empresarial para el Desarrollo de la Industria de Defensa en Asturias cuenta ya con 46 compañías asociadas, da trabajo a más de 2.500 personas y supone cerca del 15% del PIB asturiano, según los últimos datos del Principado.

En la Asociación hay empresas de todos los tipos y tamaños. Empresas como EXPAL – RHEINMETALL, que produce en Trubia munición para artillería.

"La principal característica de nuestra empresa es que nosotros somos capaces de fabricar el producto completo", nos explica el director de la planta, Carlos León, destacando que "partimos de la materia prima y entre todas las plantas que tenemos en España, coordinados desde Madrid, ofrecemos el producto final".

"Nosotros fabricamos munición, distintos tipos de munición", nos cuenta, señalando que "cada planta está especializada en distintos calibres y nosotros aquí, en Trubia, lo que fabricamos son las partes metálicas de esa munición".

La planta asturiana estuvo a punto de cerrar hace unos años, pero tras su adquisición por la multinacional alemana Rheinmetall no ha dejado de crecer. Actualmente, trabajan en ella más de 200 empleados y el objetivo es llegar a los 300 para atender la demanda.

"Afortunadamente estamos en una región en la que tenemos una tradición, tanto de Industria militar como de Industria general, muy alta, muy larga", destaca Carlos León, lo que permite contratar a trabajadores que ya tienen un perfil industrial, aunque luego "nosotros les vamos formando y les vamos dando experiencia en las particularidades que tiene en la fábrica".

Las guerras actuales no sólo se hacen con blindados y cañones y Asturias también cuenta con compañías que trabajan en el nuevo frente de batalla: el ciberespacio.

"Cuando hablamos del entorno militar, pensamos siempre en tanques, en bombas, en misiles, pero realmente hay mucho más", nos cuenta Alejandro Castro, de Proactiva Net, destacando que "antes hablábamos de tres ejércitos, pero, realmente, ahora mismo hay cuatro: tierra, mar, aire y lo que se llama el ciberespacio. Las guerras de hoy, en cierta manera, se luchan ahí".

Proactiva Net es una empresa asturiana, con sede en Gijón, que ha diseñado un software para inventariar y gestionar las redes informáticas de empresas que, también, tiene uso en las redes militares.

"Sobre esa red, que ya debería ser tremendamente segura, al tener el inventario de todos los activos nosotros sabemos si ese PC, ese servidor, ese router, todas esas cosas están actualizados, son seguros, si tienen una buena o mala configuración, si aquí o allá falta un parche", nos explica Alejandro.

Y la utilidad no acaba ahí, su software permite "generar información o evidenciar el estado real desde el punto de vista de la ciberseguridad. Informa a los administradores de cómo están de bien o cómo están de mal. Y luego, en ciertos equipos, somos capaces de automatizar la resolución de esa posible vulnerabilidad".

Su software ya ha sido adquirido por el ministerio de Defensa español y, tras unas maniobras en Polonia, han conseguido la homologación de la OTAN. Es uno de los pocos que tiene ese reconocimiento y confían en poder exportar su producto a varios países.