Adrián Pumares, el tímido que más habla en la Junta General
Así es el candidato de Foro a la presidencia del Principado
Madrid - Publicado el - Actualizado
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La tradición política estadounidense tiene una figura conocida como “filibustero”, que muchos recordaran por la película “El caballero sin espada” con James Stewart. El término describe la estrategia parlamentaria de solicitar la palabra y no abandonarla, algo posible al carecer de restricción de tiempo en los debates (algo impensable en España). De este modo, un discurso de horas y horas seguidas evita la conclusión del debate y la consiguiente votación.
En la Junta General del Principado de Asturias uno de los pocos diputados que parecen capaces de utilizar esta táctica, si fuera posible hablar sin límite de tiempo, es Adrián Pumares.
En la legislatura que acaba de terminar, el candidato de FORO Asturias habló en 800 ocasiones ante el Pleno autonómico, más que el presidente Barbón. Y si se suman las intervenciones en las Comisiones, esta Legislatura ha estado en el uso de la palabra durante más de setenta horas.
Sin embargo, aunque pudiera hacerlo, parece poco probable que el candidato forista empleara la teatral táctica pirata de los senadores americanos. El perfil de Pumares es otro, alejado del ruido y, en la medida de lo posible, también de los focos.
Economista de 33 años, este lavianés de familia minera fue primero concejal en su concejo natal, donde coincidió en el Pleno municipal con Adrián Barbón, entonces alcalde de Laviana y hoy presidente del Principado.
Pumares era entonces el único concejal de FORO Asturias en la cuenca del Nalón, hasta que renunció a su cargo (un año después también abandonaría el concejo Barbón) por motivos profesionales.
Siguió vinculado al partido y, en 2018, Carmen Moriyón lo eligió como compañero de ‘ticket’ en su llegada a la Presidencia de Foro Asturias, ocupando el cargo de secretario general y número dos de la candidatura al Principado en las elecciones de 2019. Tras la renuncia al acta de Moriyón, Pumares se hizo cargo del liderazgo parlamentario de la formación, mientras la ex alcaldesa de Gijón ejercía el del partido.
Un liderazgo que acabaría resultando especialmente duro: recién empezada la Legislatura el Grupo Parlamentario se rompió, al igual que el partido, y Pumares afrontó la pandemia y el resto del mandato como el único diputado ‘de facto’ de su Grupo. Todo en medio del enfrentamiento con el fundador del partido, Francisco Álvarez Cascos, al que la nueva dirección acabaría llevando a los tribunales por presunta apropiación indebida.
De carácter más bien tímido, Pumares se convirtió en protagonista de uno de los momentos álgidos de la legislatura que ahora termina: El suyo era el voto número 27 que podría hacer posible la reforma del Estatuto de Autonomía que pretendía el presidente Barbón.
Su posición, favorable a la oficialidad del asturiano, pero exigiendo una profunda reforma fiscal para dar su apoyo, le granjeo críticas a izquierda y derecha. Vox incluso puso vallas con la cara de Pumares y la boca tachada o un dibujo del diputado de FORO Asturias besándose con el presidente socialista.
De cara a las elecciones de este 28 de mayo, Pumares está convencido de que “vamos a ser la gran sorpresa”, insistiendo en el mensaje de que son “el único partido de Asturias, que no tiene jefes en Madrid y que pone a Asturias lo primero”.
Independientemente de la realidad que arrojen las urnas, el candidato más joven de quienes se disputan la Presidencia del Principado asegura que estará “desde el día siguiente a las elecciones defendiendo los intereses de Asturias desde la Junta General”.