La fragilidad defensiva impide puntuar a la Unión Deportiva Las Palmas

Al conjunto de Luis Carrión no le salió nada en un primer periodo que acabó con un marcador claro a favor de los rojiblancos. Habían anotado Sancet y Nico Williams para establecer un 0-2 ilustrativo de la eficacia visitante y las dificultades del equipo local.

Aunque fue la UD Las Palmas la que primero pudo anotar en practicamente la primera jugada del partido, el Athletic estuvo muy cerca de dejar más que finiquitado el resultado en los primeros 45 minutos.  Inmediatamente después de esa primera ocasión amarilla, fue el Athletic quien marcó tras otra jugada que se inició en un saque de banda. Iñaki Williams coló el balón en el corazón del área y Sancet lo aprovechó para batir a Cillessen.

Tras el 0-1 el equipo amarillo lo intentó pero una falta preocupante de intensidad y agresividad defensiva dieron el control total del encuentro a un Athletic que pasó a ser de forma clara el dominador del encuentro.

Justamente antes de llegar a la media hora de juego llegó el segundo gol, en otra ocasión donde los amarillos demostraron una indulgencia importante y donde el rival con las ideas muy claras prácticamente sentenciaba el encuentro. 

La desventaja era importante pero aún quedaba una hora de juego para la reacción. Las Palmas apeló al amor propio para intentar levantar la tarde, que se había oscurecido con los goles vizcaínos. 

Los últimos minutos del primer tiempo dieron un cambio de cara de los amarillos. Kirian, en el minuto 37, tuvo la oportunidad para recortar la distancia. El capitán se entendió con Moleiro, penetró en el área y chutó superando al portero. Sin embargo, el defensa Paredes rechazó el cuero cerca de la línea de gol, cuando parecía que el balón iba a alojarse en la portería de la Grada Curva.

Ya en el segundo tiempo antes de la hora de juego el encuentro dio un giro innesperado. Tras pase en profundidas de Kirian, Sandro gana la posición a Jauregizar, que se ve obligado a derribarlo, y al ser el último hombre fue expulsado por roja directa. 

El lanzamiento de la falta significó el 1-2 para la UD Las Palmas. Sandro mandó zapatazo a la escuadra derecha de la portería de Aguirrezabala y puso a los amarillos a tiro de piedra de empatar el encuentro. 

Cuando el dominio de la UD Las Palmas era total, llegó el nuevo regalo defensivo de la Unión Deportiva en forma de pasividad ante el centro de los bilbaínos al segundo palo, donde Willliams enganchaba y Paredes ponía en tercero en el marcador. 

Tiró de orgullo la Unión Deportiva Las Palmas que volvió a la carga y recortó diferencias a través de Álex Muñoz a centro de Kirian. Pero el esfuerzo final fue estéril porque el Athletic protegió su renta y salió airoso de la isla.