FÚTBOL
El CD Tenerife se clasifica para la eliminatoria definitiva por el ascenso
Madrid - Publicado el - Actualizado
2 min lectura
En el primer ataque visitante, tras una acción de córner, el balón rematado por Enric Gallego de cabeza acabó sobrepasando la línea de gol. Raúl Navas llegó a despejar el cuero, pero el tanto subió tras consulta de la sala VAR.
El ánimo no decayó en la grada con una desventaja global 0-2 para el CD Tenerife. Las Palmas tardó unos minutos en coger la sintonía del encuentro y generó su juego ante un rival organizado a nivel defensivo, que no tenía problemas en interrumpir con faltas las combinaciones del equipo local.
Viera echó a sus espaldas las iniciativas de su equipo, que morían con disparos lejanos y cómodos para el portero Juan Soriano. Lo intentaron Rober, Moleiro y el propio Viera.
Pero el guión del encuentro iba a dar un giro de tuerca muy negativo para los intereses grancanarios. Todo sucedió en los minutos finales del primer periodo. Jonathan Viera se marchó del campo, lesionado, entre lágrimas. Se había resentido en los primeros minutos del encuentro e intentó tirar del grupo. Sin embargo, no pudo continuar en el campo y fue relevado por Maikel Mesa. Y si ya el panorama era preocupante, todavía empeoró cuando justo antes del descanso la sala VAR alertó al colegiado para la señalización de un penalti en el área local.
Los jugadores de García Pimienta protestaron la decisión, al saltar Navas y contactar con Mollejo, que estaba a su espalda. El defensa tocó el balón antes, pero Pérez Pallas (en el vídeo arbitraje) y González Esteban concedieron la pena máxima. Enric Gallego se encargó de anotar el lanzamiento desde once metros, aunque Valles estuvo a punto de rechazarlo.
Sin Viera (lesionado) y Jesé (relevado por Benito) Las Palmas encaró con entusiasmo el segundo tiempo, cargando nuevos intentos en el campo blanquiazul. Pudo reducir el 1-2 Kirian, en una acción desviada in extremis por un zaguero, pero finalmente el gol de la esperanza grancanaria llegó tras jugada de córner y remate de Eric Curbelo con la testa.
Quedaban 20 minutos, pero el marcador no se volvería a mover, por más intentos de voltearlo que realizaron los amarillos hasta el minuto 95.