Autoescuelas denuncian retrasos por falta de personal: “Los alumnos están listos, pero no se pueden examinar”

Sacarse el carné de conducir se ha convertido en una carrera de fondo. No por la dificultad de las pruebas, sino por las esperas. Aunque el número de aspirantes no ha crecido significativamente, las autoescuelas denuncian que el proceso se ha vuelto más lento, y todo apunta a una causa clara: faltan profesores y, sobre todo, examinadores.

Noelia Yánez, directora y profesora de Autoescuelas Trébol, ha explicado en Herrera en COPE Canarias que el problema no está en la demanda de alumnos, sino en la capacidad del sistema para atenderla. “El número de personas viene siendo el mismo. El problema es que hay menos examinadores. Además, todo está informatizado y tiene que pasar por el filtro de la Dirección General de Tráfico, lo que ralentiza el proceso. Los alumnos pueden estar formados en un mes, pero no se pueden examinar” cuenta la directora de la Autoescuela Trébol.

Los alumnos pueden estar formados en un mes, pero no se pueden examinar

Noelia Yánez, directora y profesora de Autoescuelas Trébol

Yánez compara la situación actual con la de hace unos años. Antes, en tan solo tres semanas se podía tener aprobado el teórico. Ahora, los plazos se han disparado.“Antes, alguien avispado podía estudiar el teórico en 15 días, y a la semana estaba examinándose.  Solo para que te den respuesta a la solicitud del examen pasan entre 9 y 10 días hábiles. Y en verano puede llegar a tardar hasta un mes.”

Falta de relevo generacional  

A esta ralentización se suma otro problema: el relevo generacional. Los profesores de autoescuela se están jubilando y no hay suficientes jóvenes formándose para sustituirlos.“Ahora es más accesible formarse como profesor que antes. Existen cursos específicos a través de FP, y en Gran Canaria hay dos centros que los imparten. Pero la realidad es que se forman 10 y se jubilan 30”, lamenta Yánez.

 La experiencia de un alumno  

Raúl Linares es uno de los muchos jóvenes que ha vivido en primera persona los retrasos. Se apuntó a la autoescuela justo después de terminar la PAU, en junio. No pudo examinarse del práctico hasta octubre. “En dos o tres semanas ya estaba preparado para el teórico, pero me dijeron que había una cola de espera de dos semanas. Cuando quisieron inscribirme, el servidor de la DGT se había caído. Eso retrasó todo una semana más”, recuerda el joven.

El examen práctico también le obligó a esperar más de un mes. “Me dijeron que había una lista de espera. Primero tenían que examinarse mis compañeros y después yo. Además, como soy del norte, tenía que ir hasta Santa Cruz para hacer las prácticas, y eso también alarga los tiempos.”

En dos o tres semanas ya estaba preparado para el teórico, pero me dijeron que había una cola de espera de dos semanas.

Raúl Linares conductor Novel  

 Un sector tensionado y sin refuerzos  

Lo que antes podía resolverse en un par de meses ahora puede extenderse todo un verano. Y sin refuerzo por parte de la administración, las autoescuelas temen que la situación empeore.

La solución, según los profesionales del sector, pasa por reforzar las plantillas de examinadores, agilizar los trámites administrativos y seguir incentivando la formación de nuevos profesores. Mientras tanto, miles de jóvenes seguirán esperando para obtener su carné… con el temario aprendido y la paciencia al límite.