Una funcionaria de prisiones de Las Palmas II denuncia que se ha introducido droga con tirachinas

En el Centro Penitenciario Las Palmas II ha surgido un preocupante aumento en el tráfico de drogas en los últimos meses. Este incremento ha generado gran inquietud entre las autoridades penitenciarias y ha desencadenado una serie de medidas para abordar la situación. Según fuentes internas del centro, el aumento en la entrada de drogas se ha atribuido principalmente la falta de personas exclusiva con conocimientos en rayos X.

Así lo ha denunciado en los micrófonos de Herrera en COPE Gran Canaria, una de las portavoces del Sindicato Profesional de Trabajadores Penitenciarios, tu abandono me puede matar, Maica Gómez, quien denuncia que "desde 2019" están denunciando la falta de un especialista en la materia "solo disponemos de un detector de metales, pero las sustancias en las cavidades internas del organismo no las detecta", por lo que supone un coladero de sustancias estupefacientes

Gómez, incluso, nos ha relatado situaciones muy preocupantes para la salud de los reclusos que esconden cilindros de drogas en los intestinos. Uno de ellos tuvo que ser trasladado a un centro médico porque la heroína estalló en el interior con el peligro que esto supone, ocurrió el 4 de diciembre cuando se sospechaba que un interno portaba varias bolsas de droga, esta información generó que los funcionarios observaran su actitud y finalmente, debido a la alarma de lo ocurrido, se tuvo que trasladar a un hospital: "Su vida corrió peligro y por minutos no falleció",

Se intentó introducir con un tirachinas

La impunidad es tal que incluso familiares de los internos ya no se esconden y se generan situaciones como la introducción de droga a través de un tirachinas, nos relataba lo ocurrido, afirmando que "gracias a la vigilancia, se detectó el caso de un familiar que sin rubor lanzaba con un tirachinas bolas de droga en el interior del patio de los reclusos más peligrosos".

Gómez se alarma ante el hecho de que familiares introduzcan droga. Considera que "no es lógico" que un familiar ofrezca sustancias tan nocivas para su salud, "no lo entiendo". Además, esto genera un mercadeo que deriva en comportamientos muy agresivos con resultados imprevisibles entre los reclusos.

El incremento en el tráfico de drogas no solo representa una amenaza para la seguridad dentro del centro penitenciario, sino que también tiene consecuencias graves para la rehabilitación y reinserción de los reclusos. El consumo de drogas puede exacerbar los problemas de salud mental y aumentar las tensiones entre los internos, dificultando así los esfuerzos de rehabilitación.

Ante esta situación, las autoridades penitenciarias están trabajando en estrecha colaboración con la policía local para identificar y detener a los responsables del tráfico de drogas, así como en implementar programas de prevención y tratamiento para los reclusos afectados. En resumen, el aumento en la entrada de drogas en el Centro Penitenciario Las Palmas II representa un desafío significativo para las autoridades, que están tomando medidas enérgicas para abordar esta problemática y garantizar la seguridad y la rehabilitación de los internos.