SOCIEDAD
La cotorra margariteña, un ejemplo de éxito en la conservación de especies
Loro Parque Fundación apoya técnica y financieramente la protección de este loro en Venezuela donde se ha conseguido triplicar el número de especies en libertad
Madrid - Publicado el - Actualizado
3 min lectura
Loro Parque Fundación presta apoyo técnico y financiero al proyecto de protección de la cotorra margariteña de Venezuela, que está alcanzando un gran éxito. La defensa de la cotorra margariteña o amazona de hombros amarillos se va logrando gracias a una amplia trayectoria de vigilancia, en las áreas donde la especie es más vulnerable. La situación de estos loros era delicada como consecuencia de la destrucción progresiva de su hábitat, propiciada por el desarrollo turístico, la extracción de arena para la construcción y la caza furtiva de polluelos para el comercio de mascotas.
Para proteger esta especie Loro Parque Fundación viene llevando a cabo un programa a través de la acción de ecoguardianes que vigilan los nidos para evitar la extracción de los pichones por parte de los cazadores furtivos. El apoyo financiero para el programa alcanza la cifra de 450.000 dólares, gracias a lo cual esta especie ha salido del estado de vulnerabilidad en la naturaleza.
Este loro, por su carácter amable y sus atractivos colores, en los que destaca el amarillo de su cabeza y hombros, ha sido capturado desde antaño y adoptado o vendido como mascota. Y este es el motivo por el que la Fundación colabora directamente con la organización Provita que, con métodos científicos y de educación, ha logrado mejorar el número de ejemplares de esta especie en su ambiente natural. Ello se complementa con el uso de nidos artificiales y la reparación de oquedades en los árboles que son rotos por los cazadores dejando inútil el sitio de cría.
Rafael Zamora, director científico de Loro Parque Fundación, habló en los micrófonos de COPE CANARIAS, del estado de este animal y de cómo se trabaja por su protección. “El color amarilo y su simpatía” son unos de sus atractivos y también por lo que es tan codiciado. “Era uno de los loros habituales que también se veían en Canarias”, “sustraídos de la Naturaleza”. “Una cosa es que las poblaciones locales lo tengan de mascota y otra que el mundo entero lo quiera en su casa y hay que convencer a la gente de que su lugar está en la naturaleza”, apuntilló Zamora.
Desde Venezuela se contó con las impresiones del biólogo de Provita, José Manuel Briceño, que alabó el apoyo de la Fundación Loro Parque ya que, entre otros éxitos, han logrado que “vuelen 202 cotorras” y se ha “triplicado” el número de especies en la zona. Asimismo, explicó cómo muchos cazadores furtivos, tras el trabajo con las comunidades, se han convertido en los protectores de estas especies. “Es muy importante trabajar con la gente” y “merecen tener otra oportunidad” ya que en la isla de Margarita hay familias que sobreviven con los ingresos de la caza furtiva, declaró Briceño. La vigilancia de las áreas de nidificación durante la época de anidación y la formación de un equipo de 21 ecoguardianes, a los que se les impartió formación sobre aspectos relacionados con la gestión de las amazonas de hombros amarillos, la biología de las aves y la bioseguridad, son parte de las claves del éxito de este proyecto.
Trabajo con los nidos artificiales en Venezuela
La mayor reserva genética de loros del mundo se encuentra en las instalaciones de Loro Parque en Tenerife y, como explicó Zamora, es la mejor garantía de que la especie pueda salir adelante pese a los problemas que puedan surgir. Por todo ello, el centro de cría de Loro Parque Fundación es el espacio de mayor reproducción de la especie a nivel mundial, habiendo nacido en estas instalaciones más de 270 ejemplares en los últimos 50 años.
Gracias a estos nacimientos que se realizan bajo cuidado humano existe un alivio en la presión de capturas en la naturaleza ya que cae la demanda ante la mejor opción de obtener ejemplares saludables y nacidos en entornos controlados.