SUCESOS
Dos nuevos objetos hallados por el ‘Ángeles Alvariño' refuerzan la hipótesis del suicidio de Gimeno
Fueron localizados antes de la última avería del buque oceanográfico
Madrid - Publicado el - Actualizado
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A más de 1.500 metros de profundidad y a cinco millas de la costa, así localizó hace varios días el buque Oceanográfico “Ángeles Alvariño” varios elementos de submarinismo que pertenecen a Tomás Gimeno. Tal como adelantó el Programa de Ana Rosa, hace al menos dos días –antes de que el buque se viera obligado a regresar a puerto-, el sonar de barrido lateral localizó dos señales que llamaron la atención de los investigadores. Se trata de dos pequeñas botellas de oxígeno denominada Heed, unos envases que no son más grandes que un botellín de agua de medio litro, y que fueron concebidos en sus inicios para situaciones de emergencias acuáticas de pilotos militares que requieran de una pequeña cantidad de aire extra. Los agentes de la Benemérita tras el hallazgo y comprobaron el número de serie de las botellas, consiguieron certificar que son propiedad de Tomás Gimeno.
Asimismo, se ha confirmado el hallazgo de un pequeño “submarino scop” a bordo de la lancha de Tomás Gimeno, Esquilón, un hecho que trasciende ahora y que descartaría la posibilidad lanzada por algunos medios de comunicación acerca del hecho de que Gimeno podría haber huido nadando hacia la costa.
MUERTE GIMENO
Aunque aún no se ha localizado el cuerpo de Tomás, la Guardia Civil cree además que Gimeno no murió ahogado, si no que se suicidó con la conocida como muerte por exceso de oxígeno. Esta hipótesis se apoya en el hecho de que ambas botellas heed, se encontraron vacías, tras haber ingerido el oxígeno en su interior por parte de Tomás, para posteriormente tirarse al mar lastrado por el cinturón de plomos, el cual se continúa buscando.