La Guardia Civil de Cantabria deniega el permiso de armas a un hombre investigado por un delito de odio

La Guardia Civil de Cantabria no ha renovado las licencias de armas que había solicitado un hombre de la comarca de Liébana, que fue investigado por un presunto delito de odio.

Aunque actualmente carecía de armas, pretendía que se le renovaran las licencias de armas tipo E y D, que le habilitarían para la tenencia y uso de escopetas, carabinas y rifles.

Conviene recordar que la Guardia Civil es el Cuerpo que tiene en España encomendada la competencia exclusiva sobre el control de las armas y explosivos. Un control que es extensible a las personas que son autorizadas y por ello se deben analizar las conductas que puedan ser incompatibles con el uso de las armas.

La persona a la que no se ha renovado el permiso, en octubre del pasado año, solicitó la renovación de las licencias de armas tipo E y D, que ya había tenido anteriormente y que habían caducado en noviembre de 2023.

Igualmente, en noviembre de ese mismo año hizo entrega en la Intervención de Armas y Explosivos de la Guardia Civil del arma que tenía en propiedad, una carabina del calibre 22, que fue depositada para su destrucción.

PROCEDIMIENTO

Tras esta nueva solicitud de renovación, y dando cumplimiento a la normativa vigente sobre armas y protección de la seguridad ciudadana, la Guardia Civil ha realizado las averiguaciones tendentes a conocer si tuviera antecedentes y a conocer todas las conductas que puedan poner en peligro la integridad de las personas.

De esta forma, se vio que esta persona había sido investigada por un presunto delito de odio, relacionado con injurias y menosprecio hacia otra persona por razón de sus orígenes, "que se han podido repetir en diferentes ocasiones".

Por ese motivo, teniendo en cuenta que la tenencia y uso de armas "no puede ser autorizada a las personas que representen un riesgo propio o ajeno", así como para la seguridad pública y ciudadana, se ha procedido a denegar la petición.

Una vez analizados los antecedentes de conducta del solicitante, se comprobó que "han variado en relación a cuando fueron concedidas las licencias, con conductas anómalas, agravadas por el presunto delito de odio".