'Pan casero, de ése quiero': Ciudad Real celebra el Día del Pan repartiendo 5.000 panecillos
Escolares y vecinos de la capital que se acerquen a la Plaza Mayor, se les ofrecerá una degustación del pan que confeccionan los panaderos artesanos de la capital.
Toledo - Publicado el - Actualizado
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La Asociación Provincial de Panaderías y Pastelerías de Ciudad Real (Afexppan) ha vuelto a celebrar, como cada 16 de octubre desde hace casi una década, el Día Mundial del Pan. Un alimento indispensable en nuestra mesa cada vez que nos sentamos para comer.
Para la capital ciudadrealeña este gremio de la panadería es muy importante porque se reivindica y ensalza la figura de panaderos y personas que dedican su tiempo a elaborar este preciado producto. De esta forma, Afexppan, en colaboración con el Ayuntamiento de Ciudad Real, ha instalado en la mañana de hoy una mesa en la Plaza Mayor de la ciudad donde ha informado y ofrecido cerca de cinco mil panecillos a todos los asistentes.
Para los más peques
Para todos los públicos es este Día del Pan. Se ha pensado en los más 'peques' para que un año más se llevan a cabo diferentes talleres con colegios de la capital en distintas franjas horarias, con clases prácticas para conocer al detalle todos los ingredientes y cómo se hace el pan.
Sin duda, un amplio programa para conmemorar y festejar una de las fechas más señaladas para la Asociación Provincial de Panaderías y Pastelerías de Ciudad Real, como es el Día Mundial del Pan.
Pan de Cruz de Ciudad Real
Es el producto amparado por la Indicación Geográfica Protegida (IGP) se define como el pan formado por una pieza compacta y densa, de trigo candeal, bregado de miga consistente y blanca, en forma de hogaza abombada, con corteza lisa, en cuya cara anterior lleva dos profundos cortes perpendiculares en forma de cruz, de la que toma su nombre y el código correspondiente al número de registro de la industria panadera elaboradora, y en su cara posterior porta el anagrama o logo de la IGP.
Sus características particulares del pan son su forma; redonda y aplastada, con corteza; una miga de color blanca, suave, esponjosa. En condiciones normales de conservación el “Pan de Cruz de Ciudad Real” se mantiene apto para el consumo durante 6 ó 7 días.