¿Qué preguntas me tengo que hacer si estoy pensando meter un perro en casa esta Navidad?

Llega la Navidad y con ella llegan los regalos. En estos días son muchos los niños que están escribiendo sus cartas de Navidad, cartas repletas de videojuegos, muñecas, patinetes… y también cargadas de animales de compañía.

Es un clásico estos días escuchar a nuestros pequeños aquellos de “papá, quiero un perrito”. Para los más pequeños es un gran deseo tener una mascota en nuestra casa.

Y los papás y las mamás qué hacen. En muchos casos dar luz verde a la petición de sus peques y traer ese perrito a casa. Hasta ahí todo normal, pero nos paramos a pensar los padres la responsabilidad que supone tener un animal en casa.

Es por ello que desde el Colegio Oficial de Veterinarios de Ciudad Real se ha puesta en marcha una campaña de navidad para concienciar a los padres de que un animal no es un juguete, requiere un compromiso que debemos tener presente antes de claudicar a los deseos de los pequeños.

El presidente del Colegio Oficial de Veterinarios de Ciudad Real, José Ramón Caballero, ha explicado hoy en Cope Ciudad Real que el alto porcentaje de abandonos de perros se deben precisamente a que la familia no es consciente de lo que supone tener un animal de compañía en casa cuando lo adquieren. “No son un juguete”.

Qué debemos plantearnos los padres a la hora de meter en casa un perro esta navidad. Lo primero, como decimos, es que no es un juguete, es un ser vivo con sus necesidades.

Necesidades que debemos satisfacer. Por ejemplo, tenemos que tener claro que ese animal tiene que tener un bienestar relacionado con sus cuidados alimenticios, sanitarios, etc.

El perro va a comer todos los días, es obvio. Hay que preocuparse de ello. También tiene que tener todas sus necesidades sanitarias cubiertas. Hay que llevarlo al veterinario, estar pendiente de cuando la toca la vacuna.

Y por supuesto, en caso de un perro hay que tener claro que el perro tiene que hacer sus necesidades, hay que sacar al perro varias veces al día a la calle y procurar, según razas, unos paseos que cumplan con la necesidad de ejercicio que tiene el animal. Sin olvidar de que tenemos que recoger todas sus deposiciones diarias.

Otro aspecto importante, cuando uno se va de vacaciones, qué hacemos con el animal. El animal forma parte de la familia. No es un ser humano, pero sí un ser vivo que convive con nosotros y que no podemos dejar en casa solo.

Cuando todas estas cuestiones aparecen, desgraciadamente es cuando muchas familias deciden abandonar a su animal.

Por eso lo que tienen que hacer todos los padres si están pensando adquirir un perro es pensar en todas estas cuestiones y ver si realmente van a ser responsables en familia de su cuidado.

Háganse todas estas preguntas, o mejor. Acudan a su veterinario de confianza, a la clínica de su barrio y pregunten al profesional. Ellos les sacarán de dudas y les proporcionarán la información necesaria para tomar la decisión correcta.

Y recuerden, “él nunca lo haría”.