Ante la salida de niños Cuenca refuerza la desinfección de las calles

El Ayuntamiento de Cuenca ha estado actuando estos días de cara a la salida de menores a partir de este domingo, 26 de abril. Así, a través de la empresa adjudicataria de limpieza FCC, y con el refuerzo de los efectivos de Geacam en algunos barrios, ha hecho batidas especiales desde el inicio de la semana desinfectando tanto las aceras de la ciudad con la baldeadora y el furgón hidrolimpiador como los llamados "puntos calientes", como son papeleras, bancos, pulsadores de semáforos, barandillas, farolas apoyados por mochilas pulverizadoras.

Por su parte, Policía Local y Agentes de Movilidad han comprobado que se mantiene el precintado de todas las áreas infantiles, al no poder ser utilizadas según las normas que implica el estado de alarma, ha informado en nota de prensa el Consistorio.

Este cuerpo policial local se encargará asimismo a partir de este domingo de efectuar controles en diferentes puntos de la ciudad, especialmente en zonas de parques y jardines, para confirmar que dichas salidas de menores se cumplen según lo estipulado por el Gobierno de España.

MEDIDAS DE SEGURIDAD Y RECOMENDACIONES

El equipo de Gobierno conquense ha recordado que, según dicha normativa, un adulto puede acompañar hasta a tres niños que convivan en el mismo ámbito familiar. El paseo tendrá una duración de una hora entre las 9.00 y las 21.00 horas, recomendando evitar las horas punta, y la distancia máxima será a un kilómetro del hogar. No se podrá acceder a zonas de columpios ni a instalaciones deportivas, y los menores no deberán acercarse a otros niños.

Se mantendrán igualmente las medidas básicas de prevención, como son una distancia interpersonal de entre uno y dos metros, lavado frecuente de manos y máxima higiene en zonas públicas y privadas. Eso sí, aquellos niños que tengan síntomas compatibles con la Covid-19, como fiebre o tos, no deben salir.

Los menores de entre 14 y 18 años pueden salir a la calle en las mismas condiciones en que lo hacen los adultos en la actualidad siempre que sus progenitores lo consideren oportuno, es decir, a la compra de productos de alimentación o medicamentos, o a hacer algún recado esencial.