La destrucción de tumores de mama sin entrar a quirófano ya es posible en el Hospital de Guadalajara

El Hospital Universitario de Guadalajara ha introducido un nuevo procedimiento que permite tratar tumores benignos y cánceres de mama en pacientes que, por diferentes circunstancias, no desean o no es recomendable para ellas ser intervenidas quirúrgicamente.

La novedosa terapia, denominada Termoablación Percutánea con Microondas, ya ha comenzado a ser aplicada por los facultativos de la Unidad de Mama del Servicio de Radiodiagnóstico del centro hospitalario alcarreño, integrada por los médicos Lucía Gil, Ana Ortigado y Carlos Marco Shulke.

"Es una técnica mínimamente invasiva y muy sencilla de realizar por los radiólogos de la mama, que nos permite tratar diversas patologías de la mama", señala Marco, aclarando que, "en el caso de las tumoraciones benignas, se puede aplicar a tumores que sean menores de 3 centímetros de diámetro y que no estén muy pegados a la piel o al plano pectoral posterior".

Pero la termoablación también está indicada para pacientes con cáncer de mama, en los casos de "mujeres muy añosas, con mucha patología de base, mucha comorbilidad, que bien tienen contraindicada la cirugía o bien ellas mismas no se quieren someter a un tratamiento quirúrgico; en esos casos, se les ofrece esta terapia, asociada a la hormona que actualmente se está ofreciendo".

La nueva técnica, que se realiza de forma percutánea, comienza, tal como explica este integrante de la Unidad de Mama, con la administración de "anestesia local alrededor de la lesión nodular y el trayecto" y, a continuación, con la introducción de una aguja, también llamada "antena de termoablación", que, "guiada por ecografía", atraviesa la lesión, en cuyo interior aplica calor "estableciendo una elipse de tratamiento que lo que va a hacer es detruir el tumor por calor".

El tipo de antena, la potencia en vatios y el tiempo varían en función del tamaño de la lesión, de tal forma que "en cinco minutos, se puede tratar una lesión de hasta 2 y 3 centímetros de diámetro", subraya Carlos Marco, asegurando que las ventajas aportadas por este procedimiento son numerosas, ya que "no requiere ingreso hospitalario ni quirófano" y, después de una media hora en la sala de espera, la paciente "ya se puede ir a casa y hacer una vida totalmente normal; tiene menos cicatriz, solamente tiene la incisión, que es milimétrica y al cabo de los días ni se detecta".

En los últimos años, ha aumentado el número de diagnósticos de cáncer de mama en mujeres mayores de 70 años, que representan 4 de cada 10 nuevos casos, incrementándose por tanto las posibilidades de que estas pacientes presenten enfermedades (comorbilidades) que desaconsejen el tratamiento quirúrgico. De ahí, que la termoablación percutánea con microondas constituya una interesante alternativa a la extirpación quirúrgica.