El poder de la JMJ: Los vecinos de Oliveira do Hospital vendrán a Guadalajara en Diciembre

La diócesis de Sigüenza-Guadalajara ofertaba 200 plazas para todos aquellos jóvenes que se quisieran apuntar al viaje. No tardaron en llenarse. Los que no pudieron hacerlo tuvieron que optar por otras opciones como viajar con otros grupos, con colegios, amigos o en familia e ir por su cuenta. Por este motivo la cifra total de guadalajareños que han acudido a la JMJ de Lisboa es difícil de calcular, pero fácilmente se podría hablar de unas 400 personas.

Una de ellas ha sido el padre Emilio Vereda que, recién ordenado hace solo tres meses, ha vivido su primera JMJ como sacerdote. Nos ha contado en COPE cómo cambia vivir uno de estos viajes papales como laico a hacerlo como cura: “Es muy diferente. Yo ahora he podido ver más de cerca cómo Dios cambia a las personas. En las confesiones, con tantos jóvenes que se abrían delante del Señor pidiéndo esa misericordia de la que nos ha hablado el Papa Francisco”.

Para él, uno de los momentos más especiales ha sido el de poder 'concelebrar' misa con el Papa. Todos los ministros presentes en la misa podían hacerlo, aunque estuvieran, como dice, a un kilómetro de distancia. Más allá de ese momento Emilio no lo duda, los otros dos momentos que completan el podio de experiencias que le han marcado están claras. Por un lado, la de los días previos, cuando él y muchos jóvenes llegaron al pueblo de Olivera do Hospital, a unas 3 horas en coche de la capital lusa. “La acogida y el cariño que nos dieron fue maravilloso. Tanto es así que ya hemos hablado y concretado que las familias de acogida que nos atendieron tan amablemente vengan a Guadalajara el primer fin de semana de diciembre”. Su tercer momento, sin orden concreto, fue ese de las confesiones: “impacta mucho ver a tanta gente yendo a pedir perdón y confesarse”.

Habrá más, pero esta de Lisboa siempre será especial para el padre Emilio que lanza un mensaje para no perder la gracia ganada estos días: “Tenemos que volver a este momento para recordar lo que ha sido, no dejarnos vencer por la pereza y tenerlo presente para poder seguir en el día a día”.