Visto para sentencia el juicio contra la empleada de la sucursal del Banco BBVA de Ávila por un supuesto delito continuado de falsificación en documento mercantil, apropiación indebida y estafa
Madrid - Publicado el - Actualizado
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21 años de prisión, multa total de 10 mil euros fraccionados en pagos diarios y una responsabilidad civil de 1.300.000 euros aproximadamente es lo que finalmente ha pedido la acusación particular del banco BBVA. La fiscalía, por su parte, ha mantenido la pena de 6 años y 6 meses de prisión y una multa diaria de 20 euros durante 20 meses, así como el pago de costas. También el pago de más de 1.300.000 euros en concepto de indemnización al BBVA. En sus conclusiones, la fiscalia y la acusación particular han aclarado como la acusada, que llevaba 25 años trabajando en la sucursal del BBVA en Ávila y cerca de 40 años en la compañía, haciendo uso de la confianza que los clientes tenían depositada en ella, supuestamente les invita a renovar sus depósitos o contratar productos que ella calificaba de “rentables”, para después, supuestamente, apropiarse del dinero, llegando incluso a falsificar la firma. También han señalado que todos los estafados, un total de 21 clientes del banco, tenían el mismo perfil: gente mayor, sin herederos o de escaso conocimiento en productos financieros. Por último han remarcado como los casi 40 testigos que han pasando por el juicio a lo largo de tres días, han señalado a Angelina, que así se llama la acusada, como la empleada que les atendió. La defensa ha vuelto ha mostrar su disconformidad con los cargos que se le imputan y ha vuelto a considerar que los hechos no son constitutivos de delito. El abogado ha hecho hincapié en que ninguno de los testigos presentados eran o son trabajadores del banco y por tanto, posibles testigos directos de la supuesta estafa. Sobre la apropiación indebida, la defensa ha subrayado que es un delito que la fiscalia no ha terminado de probar. Por último, en cuento a la falsificación de la firma, el abogado ha dicho que no se puede determinar que las firmas falsificadas sean obra la acusada. En cuanto a las cuantías por responsabilidad civil que pide la fiscalia y la acusación particular, la defensa pide que se revise un posible contrato de seguros que podría tener el banco, para casos de empleados “infieles”.