La Alianza UPA-COAG se pregunta a qué espera la Consejería de Agricultura para convocar a las organizaciones agrarias representativas de Castilla y León y acordar en común “de forma urgente” un paquete de medidas de apoyo a los agricultores y ganaderos con motivo de la sequía que afecta a la Comunidad.
Esta organización calificó como “lamentable” la nula predisposición que ha demostrado hasta el día de hoy el Gobierno autonómico a la hora de adoptar medidas de apoyo para los agricultores y ganaderos, y apuntó que lo han vuelto a comprobar, “una vez más, esta misma semana con su nula intención de flexibilizar la PAC ante la situación extrema de sequía”, según indicaron a través de un comunicado de prensa recogido por Ical.
En este sentido, entendieron que resulta “un despropósito” que en la primera reunión mantenida por las Opas con el viceconsejero de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León, después del Consejo Regional Agrario, para abordar la flexibilidad de la PAC 2023 con motivo de la sequía “no hayamos visto ninguna intención a la Junta por ayudar a los profesionales del sector agrario”.
“No contemplar la aplicación de determinadas excepciones agronómicas en Castilla y León, y por lo tanto negarse a reconocer que las circunstancias así lo requieren por cuestiones de fuerza mayor como es la sequía que padecemos desde primeros de año es no querer ver la realidad de lo que está pasando”, manifestaron.
La Alianza UPA-COAG planteó que, al igual que hizo Castilla-La Mancha, el Gobierno autonómico se siente con los representantes de los profesionales agrarios para “plantear soluciones” y “no cubrir el expediente”, para lo cual entendieron que debe poner en marcha un ‘Plan Sequía’ dirigido a las explotaciones familiares agrarias.
Esto significa, precisaron, que la Junta de Castilla y León tendría que anunciar una ayuda directa similar a la de Castilla-La Mancha de 100 euros/hectárea para las explotaciones familiares agrarias de toda la Comunidad que estén afectadas por la sequía. Además, reclamaron para los ganaderos una compensación directa para ayuda a la compra de alimento animal ante la escasez de paja, ausencia de pastos y encarecimiento de los piensos.
“Ante la situación dramática en la que se encuentra el secano, el sobrecoste de los regadíos, y el encarecimiento de la alimentación animal, la Junta de Castilla y León no puede mantenerse paralizada a la espera de lo que haga el Ministerio de Agricultura, y debe encabezar una serie de actuaciones de choque para aliviar la situación límite que sufre el sector agrario castellano y leonés”, sostuvieron.
Consideraron que los agricultores y ganaderos están en “un momento crítico” por la climatología tan adversa, a lo que hay que sumar “los problemas que lleva padeciendo desde hace tiempo como es el desequilibrio en la cadena alimentaria que dificulta lograr precios justos, costes crecientes y dificultades financieras”.
“Para afrontar esta situación extrema es imprescindible que la Junta de Castilla y León garantice la viabilidad de las explotaciones familiares agrarias y aborde con compromiso y responsabilidad un verdadero ‘Plan Sequía’ que responda a las necesidades extraordinarias del sector productor, que recordemos es la base de la economía rural de esta Comunidad”, insistieron.
Finalmente, la Alianza UPA-COAG exigió al Ejecutivo autonómico que actúe y “lo haga ya mismo”, reiteraron, “sin ampararse un solo día más en su habitual táctica de que pase el tiempo sin hacer nada a la espera tan solo de lo que decida el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación o Bruselas”.