Cáritas renuncia a la subvención del Ayuntamiento de Burgos mientras no se ayude también a las tres ONGs que trabajan con inmigrantes

Cáritas Diocesana de Burgos ha anunciado que no suscribirá la prórroga del convenio de acogida temporal para inmigrantes con el Ayuntamiento de Burgos, al menos hasta que se alcance un acuerdo que contemple también a las entidades sociales que trabajan con este colectivo en la ciudad. En una reunión celebrada este lunes, los responsables de Cáritas, Mario Vivanco e Ignacio Ruiz, expresaron su postura ante representantes municipales, incluyendo a la alcaldesa Cristina Ayala y el portavoz de Vox, Fernando Martínez Acitores.

La decisión responde a la exclusión de las organizaciones Burgos Acoge, Accem y Atalaya del presupuesto municipal para 2025, medida que fue impulsada por Vox durante la negociación de las cuentas del próximo año. Cáritas, que en principio renunciaría a los 19.000 euros que le correspondían en el convenio, ha mostrado su apoyo a estas tres entidades, con las que colabora de manera habitual. Según Vivanco, el trabajo que realizan estas organizaciones es "indispensable" para la atención a migrantes vulnerables, especialmente en una ciudad como Burgos, que ha visto un notable aumento de la población migrante en los últimos años.

Desde Cáritas, se subraya que la acogida, protección y promoción de los migrantes es fundamental para construir una sociedad "más justa y fraterna", en consonancia con los principios evangélicos que guían la actuación de la institución. La renuncia a este convenio supone un rechazo a la decisión del Ayuntamiento de excluir a entidades clave en la atención a los migrantes, y Cáritas ha insistido en la necesidad de mantener una red de colaboración que incluya a todos los actores sociales comprometidos con la integración de estas personas.

Nuria Revilla, portavoz de Burgos Acoge, criticó duramente la medida del gobierno municipal, calificándola de "drástica" tanto para la ciudad como para los servicios sociales. Recordó que estas tres organizaciones atendieron a más de 7.000 personas en 2023, lo que subraya la importancia de su labor. Según Revilla, la retirada del convenio "afecta de manera importante" y podría provocar un colapso de los servicios sociales municipales, ya que las organizaciones sociales cubren necesidades específicas que no son atendidas por los servicios públicos, como la tramitación de permisos de residencia y trabajo.

Por su parte, la concejala de Servicios Sociales, Andrea Ballesteros, manifestó que el gobierno local continuará dialogando sobre la cuestión, ya que se trata de un tema vinculado a la negociación del presupuesto municipal para 2025. Sin embargo, las organizaciones sociales se mantienen firmes en su postura de que esta medida debe ser revertida, y esperan que el equipo de gobierno reconsidere su decisión en los próximos días.

La controversia llega en un momento crítico, cuando la gestión de los recursos destinados a la integración de los migrantes en Burgos se ve directamente afectada por las decisiones políticas y las negociaciones presupuestarias. Las entidades sociales, que consideran que el trabajo que realizan no puede ser sustituido por los servicios públicos, seguirán luchando para que su labor sea reconocida y apoyada.

concentración en Burgos contra la exclusión de entidades sociales del presupuesto municipal

Las organizaciones Burgos Acoge, Atalaya Intercultural, Accem y Cáritas, que trabajan con personas migrantes, han convocado una concentración este miércoles, 12 de noviembre, en la Plaza Mayor de Burgos, para expresar su rechazo a la exclusión de algunas de ellas del presupuesto municipal para 2025. La protesta, que comenzará a las 20:00 horas, se llevará a cabo bajo el lema 'Burgos por la convivencia', con el objetivo de visibilizar la preocupación de estas entidades por la decisión del Ayuntamiento de excluir a Burgos Acoge, Accem y Atalaya de las ayudas municipales destinadas a la atención de migrantes.

La exclusión de estas organizaciones del presupuesto municipal fue impulsada por Vox durante la negociación de las cuentas del próximo año, lo que ha generado un amplio rechazo tanto entre las entidades sociales como entre la ciudadanía que considera que estas ONGs desempeñan una labor crucial en la integración de los migrantes en la ciudad. Según Nuria Revilla, portavoz de las organizaciones convocantes, los informes técnicos del propio Ayuntamiento corroboran la efectividad y necesidad del trabajo que realizan estas entidades.

En este contexto, las organizaciones sociales han mantenido reuniones con el equipo de Gobierno para exigir la rectificación de esta decisión y la inclusión de Burgos Acoge, Accem y Atalaya en los presupuestos municipales. Mientras tanto, Cáritas ha decidido renunciar al convenio que tenía firmado con el Consistorio, a menos que también se incluyan las otras tres entidades en el acuerdo. Las organizaciones sociales seguirán luchando para garantizar que el trabajo de apoyo y acogida a los migrantes continúe siendo respaldado por el Ayuntamiento, fundamental para una integración digna y una convivencia pacífica en la ciudad.