El director general de Política Agraria Comunitaria (PAC) de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de la Junta de Castilla y León, Pedro Medina, anunciaba anoche en Burgos que en “pocos días” casi 600 agricultores jóvenes recibirán derechos de la Reserva Nacional. Medina pronunció la conferencia inaugural del Ciclo Aula Agraria de Fundación Caja Rural, que tuvo lugar hoy en el Fórum Evolución de la capital burgalesa.
Durante este encuentro con los profesionales del sector primario de Burgos, se trataron las principales novedades en la tramitación de la PAC. El director general de la PAC en la Junta de Castilla y León destaca por ser uno de los “mayores expertos” del país, y fue el encargado de explicar a los profesionales que asistieron a este acto la situación que vive actualmente la PAC y la importancia de la convergencia en esta materia.
En relación a estos derechos, Medina explicó que comarcalmente no habrá “grandes diferencias”. “La filosofía de la PAC es una extensiva, que favorece a las zonas menos productivas frente a las productivas”, dijo. En el caso de Burgos favorecería más a comarcas como la Ribera o la Demanda, respecto a la Bureba. “Es un modelo hacia una agricultura más extensiva”, apuntó.
El proceso de evaluación y aprobación, por parte de la Comisión Europea, del Plan Estratégico de aplicación de la PAC en España marcará, en buena medida, la actualidad agraria en este primer semestre de este año. Así, el director general de Política Agraria Comunitaria de la Junta explicó que estamos ante una reforma que parecía que iba a ser un “reto” para los técnicos el poder diseñar una reforma “más ajustada al campo español”, sin embargo apuntó que viene marcada por unas directrices europeas “con un marcado carácter ambiental”.
“Más exigencias de carácter ambiental, con un presupuesto menor”, lamentó Medina, a la vez que recordó que a la PAC se le exige “más que al resto de sectores”, dentro del compromiso presupuestario en materias que vayan a favor del medio ambiente o la diversidad.
Medina lamentó así que, pese a asegurar en un inicio que la PAC gozaría de libertad para poder diseñarse, en el transcurso de la negociación se está viendo que la Comisión Europea “no suelta lastre”. “Sigue revisando a fondo si de verdad se cumplen con los compromisos”, añadió. En esta línea recordó que España es uno de los 18 países que cumplió el plazo y envió el Plan Estratégico antes de que finalizase el 2021, aunque todavía hay países que no lo han entregado.
“España ha cumplido y en teoría a finales de marzo o abril, la Comisión nos debería enviar las primeras observaciones”, señaló. Así indicó que habrá que ver si se aceptan las propuestas, aunque cree que en algunos temas seguirán “metiendo presión”, sobre todo en los temas del agua. “Más cambios que se puedan introducir respecto al planteamiento global van a ser difíciles, pero tenemos que hacer una legislación más comprensiva y cercana a nuestros agricultores y ganaderos”, apostilló.
En este momento el proceso tiene como objetivo definir el valor de unos derechos que continuarán en el periodo 2023-2027, ya que el valor fijado en 2022 servirá de “base” para determinar los nuevos valores de las 20 regiones, en lugar de las 50 actuales, y servirán para calcular el pago principal de la nueva PAC.
Atraer a los jóvenes y a las mujeres al medio rural
A preguntas de los medios acerca de otro de los grandes retos para el campo como es el relevo generacional y la igualdad de género, Medina señaló que los jóvenes y las mujeres tendrán un “refuerzo importante”, de forma que para los jóvenes hay que destinar un tres por ciento del presupuesto; y en el caso de una mujer, si además es joven, tendrá un 15 por ciento adicional.
Sin embargo señaló que, personalmente, es un tema “difícil de medir”, dado que de no hacerlo, “a veces te pasas de frenada”. “El objetivo es claro, hay que apoyar a los jóvenes pero medir muy bien ese impulso de forma que no sea excesivo”, concluyó.