El PSOECyL hace público un informe que alerta de los “vicios” que “alteran” la adjudicación del HUBU

El PSOECyL hizo público hoy un informe que alerta de los “vicios” que desde el inicio “alteran” la adjudicación y el cumplimiento del contrato de concesión de obra público-privada del Hospital Universitario de Burgos (HUBU) que, según el documento, “hacen que sea mucho más gravoso para las arcas públicas y para los ciudadanos mantener el contrato hasta el final que rescatar y revertir a la sanidad pública”, según anunció el secretario general del PSOE en la Comunidad y portavoz en las Cortes, Luis Tudanca.

Tudanca, acompañado por la secretaria general de PSOE de Burgos, Esther Peña, y el procurador socialista por Burgos Luis Briones, dieron a conocer este documento elaborado y firmado por el que fuera director de gestión del HUBU, Víctor Manuel Calleja Gómez, alto cargo -dijo- nombrado por el Gobierno del PP, dice que “la Administración ha actuado con incoherencia y falta de transparencia”.

En este sentido, Tudanca manifestó que el director de Gestión del Hospital de Burgos fue nombrado por el Gobierno de Juan Vicente Herrera, continuó en el cargo siendo presidente del Gobierno autonómico Alfonso Fernández Mañueco (PP) y gerente de Sacyl Manuel Mitadiel (Cs), al tiempo que lamentó que en cuanto les hizo llegar a Mañueco (en octubre de 2019) y a Mitadiel (en febrero de 2020), el pasado mes de marzo fue cesado de su cargo como director de Gestión del HUBU.

En este contexto, Tudanca añadió que el informe afirma que “la adjudicación no solo recayó en una oferta manifiestamente inviable, según el criterio establecido por la propia Administración” sino que “se produjo una perversión en el sistema de concurrencia que se ajustaron descalificando a los oferentes, que se ajustaron a los criterios y adjudicando a favor de quién los incumplía”.

Asimismo, Tudanca aseguró que el redactor del informe afirma que “la oferta contemplaba cero euros en reposición de equipos de alta tecnología” y subrayó que “de ahí que hoy los burgaleses sigan sin algunos equipos imprescindibles para tratamientos tan importantes como los oncológicos”. También resaltó que “de prosperar las tesis de la concesionaria quedaría absolutamente demolida la política de inversiones que pretende la Administración y situaría el hospital -citó literalmente- en un horizonte de penuria tecnológica”.

El secretario autonómico de los socialistas reiteró que el documento afirma también que hay un “compromiso documental” de la concesionaria por el que se compromete a invertir 25 millones de euros en equipamientos; “en inversiones que ni ha sido cumplido ni ha sido exigido por el Gobierno”, quien, según denunció, “está perdonando dinero a la concesionaria, a las empresas privadas”.

Además, el burgalés Luis Tudanca indicó que el escrito afirma que “los criterios por los que primero se aprueba la modificación del proyecto son totalmente contravenidos por las empresas” y que “afirma literalmente que la Administración asume los costes por estos modificados y por las demoras en la finalización de la obra sin haber formulado ninguna reclamación o reparo sobre el proyecto inicial de la concesionaria, el cual termina siendo de tal modificación que resulta irreconocible el modificado de construcción”.

“Oferta con carencias flagrantes que debió ser rechazada”

Asimismo, desveló que el redactor del informe se pregunta “cómo pasó los filtros y controles ya que se tramitarán por parte de la Junta sin conocer siquiera cuánto iban a costar la verdadera naturaleza de los modificados”. Además, agregó que afirma “una especie de rescate preventivo de la concesión a costa de la Administración para hacer viable una oferta con carencias flagrantes y que por manifiestamente inviable debió ser rechazada o alternativamente ser exigida en los estrictos términos en los que fue aceptada”.

En este sentido, Tudanca aseveró que en este informe queda demostrado que “no hay plan de inversiones” sino “una litigiosidad, demoras y una dificultad en el proceso de adquisición de equipamientos muy gravosa para las arcas públicas”. Al tiempo, advirtió de que contempla también que el Hospital revertirá a Sacyl con “unas instalaciones y equipos anticuados, obsoletos y al final de su vida útil”.

“Es decir, después de haber pagado a precio de oro el Hospital y los equipamientos, cuando revierta a la sanidad pública, si no lo impedimos, al final de la concesión tendremos un Hospital viejo, inútil para dar servicio sanitario público a los ciudadanos”. Además, agregó que “habla de alteraciones sustanciales como la explotación de la zona comercial que con su valoración deficiente y valorando una oferta absurda por parte de los definitivos adjudicatarios cambió sustancialmente los criterios de adjudicación a esta empresa con respecto a otras”.

Finalmente, Tudanca aseguró que el PSOE “no se va a rendir” y “no va a parar ni a descansar”, dijo, “por más trabas que ponga, por más intentos que haga la Junta de Castilla y León, el PP ahora con su cómplice de Ciudadanos, para tratar de ocultar, de obstaculizar todas las investigaciones, todas las irregularidades puestas de manifiesto desde el inicio del contrato hasta hoy”.

Tudanca reiteró que los socialistas “no van a parar” hasta que el HUBU “vuelva a ser público” y matizó que “ya no solo por una cuestión ideológica” dado que, según recodó, están convencidos de que la gestión pública es “la mejor” para la sanidad, sino porque además este informe señala que es “absolutamente gravoso para las arcas públicas no solo hoy sino que lo va a ser en el futuro y lo será de forma muy importante cuando al final de la concesión algunos se hayan llenado los bolsillos y le demos un hospital viejo e inútil”.

Por ello, Tudanca pidió tanto a Fernández Mañueco como a Mitadiel explicaciones acerca de “por qué tuvieron conocimiento de este informe, de estas irregularidades, y no lo contaron” ya que, resaltó, “no solo está incumplido sino que siguen poniendo piedras en el camino para que esto no sea posible nunca”.