Las carmelitas samaritanas llegan a Segovia para vivir en la casa rectoral del santuario de la Fuencisla

La comunidad de carmelitas samaritanas es la nueva moradora de la casa rectoral del santuario de la Fuencisla. En ese reciento ha concluido ya la segunda fase de su recuperación. Después de que la primera se centrase en la estructura, esta se ha dirigido a la distribución interior, como ha explicado el vicario general de la diócesis, Ángel Galindo.

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En esa casa rectoral habrá un espacio restrigindo para la clausura de las hermanas, aunque también se conserva el despacho del capellán y la sala de la Cofradía de la patrona, aneja al camarín donde permanece la imagen de la Virgen de la Fuencisla. En la parte más alta, una sala diáfana, que va a permitir desarrollar allí distintas actividades, como convivencias, oraciones o catequesis para niños, jóvenes o matrimonios, como ha explicado el obispo, monseñor César Franco.

La orden de carmelitas samaritanas ya está presente en otros puntos del país, como Asturias, San Sebastián o Valladolid. Llegan ahora a Segovia para instalar su modelo de espiritualidad carmelitana, vivida desde el punto de vista de la humanidad de Jesús, como ha explicado la priora, Olga María del Redentor.

La madre Olga ha confirmado que, de manera estable, serán seis las hermanas que vivan en Segovia, aunque ha puntualizado que la suya es una congregación marcada por la movilidad y la disponibilidad, según las necesidades de los distintos territorios, con cierto componente nómada. Otra de sus características es la adoración eucarística e invitan a que se participe en la que protagonizan todos los jueves, entre las nueve y media y las diez y media de la noche.