Fallece el sacerdote Jesús Hernández Sahagún, confesor infatigable con múltiples encomiendas pastorales

Hombre de fe y confesor infatigable. Así define José Andrés Cabrerizo, deán de la Catedral de Valladolid, al sacerdote Jesús Hernández Sagahún, fallecido en la madrugada de este martes 27 de junio. Un hombre muy de su pueblo, Medina de Rioseco, Valladolid, y de la Cofradía de la Flagelación, de hecho en 2009 fue pregonero de la Semana de Pasión de Rioseco. El funeral se celebrará este miércoles en su localidad natal, a las 12:00 horas en la Parroquia de Santiago.

Fue Capellán de las Salesas durante 45 años, pero sobre todo ha sido un confensor “infatigable, un hombre de fe y tremendamente trabajador”, como destaca Cabrerizo.

Jesús Hernández nació en Rioseco el 2 de septiembre de 1935. Estudió en Comillas, Valladolid y la Universidad de Navarra. Era Licenciado en Derecho Canónico y presbítero desde el 19 de junio del 1960. Entre sus muchas encomiendas pastorales, fue ecónomo en Castrejón, vicario en Laguna de Duero, encargado en La Mudarra, regente en La Unión de Campos, coadjutor de San Miguel de Valladolid, capellán del colegio de La Asunción, notario del Tribunal, profesor de religión en el Núñez de Arce y el colegio de El Salvador, exorcista diocesano, delegado de Peregrinaciones, capellán de Las Salesas y canónigo penitenciario.

El viernes 30, a las 19:00 se celebrará un solemne funeral en la Iglesia de los Sagrados Corazones de Jesús y María, ofrecido por la comunidad de las Salesas y por la Asociación de la Guardia de Honor.