La lucha de unos padres por mantener a su hija con autismo en un colegio de Valladolid: “Por humanidad”

Elisa es una niña de 13 años “muy especial”. Es la “princesa” entre sus compañeros del colegio público San Fernando, es la única niña. Comparte clases de educación física, música, religión y el resto de la jornada, entra en un aula con otros cuatro alumnos que, como ella, están diagnosticados con trastorno del espectro autista. Si miras a Elisa ves a una niña “feliz, serena” que quiere seguir viviendo una “vida normalizada” en un colegio “ordinario”. 

No siempre ha sido así, ha pasado por varios centros especiales y la experiencia “no ha sido buena”. El ánimo de Elisa se derrumbaba, nunca se adaptó a estos espacios. La ley educativa le impide seguir dos años más en el Colegio San Fernando y, si no se contempla una excepción, Elisa deberá matricularse en un centro de educación especial.

Sus padres, Henar y Sergio han iniciado una cruzada judicial y social para conseguir que su hija permanezca en este centro hasta los 16 años. Elisa es “la ternura, la sensibilidad” lo que necesita es un espacio que le den mucho cariño, lo ha pasado mal en otros centros, ahora está tranquila, nos cuenta Henar, su madre en COPE.

Desde que está en este centro, se encuentra mejor, más tranquila. “Está arropada se siente querida. Por profesores y alumnos”. Por todo los sufrido anteriormente, lamenta su madre, “se lo merece más que nadie”. Poder seguir progresando, después de tener que estar dos años sin escolarizar. Eso, le hizo retroceder.

“La niña estaba desubicada, si para un niño normal es duro, para un niño con autismo es tremendo”, nos dice Sergio, su padre. Y es que Elisa, está “perfectamente adaptada, por lo que apelamos al sentido común”. Sus padres quieren que siga estudiando en este colegio público hasta los 16 años. “Serían dos cursos más. No estamos pidiendo nada raro”, apuntan.

Pasos a seguir

Educación tiende a agrupar a los niños, según sus necesidades, y sacarlos de la educación ordinaria para derivarlos a centros especiales. La experiencia de Elisa no ha sido del todo positiva. La ley exige que Elisa salga de este centro. 

La LOMLOE prevé sólo poder repetir curso una vez en primaria. ¿Puede flexibilizarse? Esta norma se desarrolló por decreto en todas las Comunidades Autónomas recuerda Sergio. “Se nos esta dando una respuesta sesgada por parte de la inspección, en la propia ley hay otros artículos que habla de inclusión y flexibilización”.

Elisa, entra en una clase especial con otros cuatro niños. Son cinco y cuentan con cuatro especialistas “a veces cinco”. “Este centro tiene los medios”, se muestran seguros los padres. Por eso, tienen la esperanza de que la ley les ampare. “El colegio nos apoya, pero se ve entre la espada y la pared. La inspección obliga a cumplir con la normativa, pero tenemos confianza en que si hay resolución judicial sea favorable”, explica Sergio.

Ahora hay que presentar un recurso contencioso administrativo, ante la negativa que ya les ha dado la inspección de Educación. “Y ese recurso tendrá a su vez otro recurso para ver si se articula por derechos fundamentales. Tiene incluso un trámite directo para un recurso de amparo ante el constitucional. Vamos a agotar todas las vías”, apuntan.

“Estamos pidiendo simplemente que nuestra hija este dos años más en este colegio. Que siga tranquila, que pueda seguir progresando. Que esté donde mejor este. Y más con lo que ya ha pasado”, concluyen.