Miles de botellas de vino de Toro llegaron a Venezuela por encargo de Víctor de Aldama para Rubén Villalba

Víctor de Aldama, expresidente del Zamora Club de Fútbol, reveló durante su declaración ante el juez del caso Koldo que envió varias botellas de vino de Toro, patrocinador del club en su etapa presidencial, al comandante de la Guardia Civil Rubén Villalba. Este gesto, según Aldama, fue una muestra de agradecimiento por los servicios prestados por Villalba para facilitar su relación con la embajada de España en Venezuela, donde deseaba obsequiar a los visitantes con productos nacionales.

La confesión de Aldama se produjo durante una declaración de casi dos horas en la que abordó diversos aspectos del presunto fraude de hidrocarburos que se le atribuye en el marco de la investigación del caso Koldo. Aunque el grueso de sus palabras se centró en esclarecer las acusaciones en diferentes líneas, esa referencia al vino de Toro fue la única mínima conexión con el Zamora Club de Fútbol que hubo en la declaración. Un gesto que según comentó el propio empresario madrileño tuvo un carácter puramente protocolario.

Tras su declaración, Víctor de Aldama abandonó el centro penitenciario de Soto del Real, donde estaba en prisión preventiva, bajo estrictas medidas cautelares para garantizar su disponibilidad durante el proceso judicial. Entre estas, destaca la retirada de su pasaporte, la obligación de fijar un domicilio para recibir notificaciones y la necesidad de informar cualquier cambio de residencia al juzgado.

Además, deberá comparecer semanalmente ante el tribunal, facilitar un número de teléfono para estar localizable en todo momento y tiene prohibida la salida del territorio español sin autorización previa. Estas medidas reflejan la gravedad del caso y el interés de la justicia por evitar riesgos de fuga o interferencia en la investigación.

El caso Koldo sigue siendo uno de los episodios más mediáticos de los últimos tiempos, debido a la implicación de figuras relevantes en un esquema de presunto fraude. La liberación de Aldama bajo estas condiciones marca un nuevo capítulo en un proceso que podría extenderse durante meses. La investigación continúa y, aunque Aldama ha recuperado provisionalmente la libertad, su futuro legal permanece en manos de la justicia.