Activistas irrumpen en un acto de Raquel Sánchez en Barcelona para pedir regular los alquileres

Una decena de activistas del Sindicat de Llogateres ha interrumpido este viernes el acto de presentación de la nueva estación de Sants de Barcelona durante la intervención de la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, para exigir la regulación de los precios de los alquileres.

Al inicio de la intervención de Sánchez, una representante del sindicato que estaba entre el público ha cortado a la ministra, que estaba realizando su intervención, y le ha pedido que paralice la subida de los alquileres: "No podemos llegar a final de mes, es urgente, está en sus manos, es su responsabilidad".

"No lo podemos resistir, nos estamos ahogando y somos millones de personas en Catalunya y en toda España", ha añadido la activista, que ha pedido una reunión a Sánchez y le ha advertido de que, si no es así, volverán a los actos donde acuda para que les haga caso.

Sánchez le ha respondido que les preocupa la subida de precios del alquiler y que se sentarán a hablar con el sindicato de nuevo: "Estamos presentando un proyecto de ciudad que es importante pero esto no obvia la preocupación que sentimos por las problemáticas de la subida de precios".

Tras su respuesta, unos seis activistas han entrado en la carpa donde se estaba haciendo la presentación gritando consignas como 'Raquel Sánchez, regula los alquileres' y con carteles con lemas como 'Basta subidas de alquileres' y 'Queremos un decreto de la regulación de alquileres'.

En el acto de presentación del proyecto de ampliación y mejora de la Estación de Sants de Barcelona también estaban la alcaldesa de la ciudad, Ada Colau; la presidenta de Adif y Adif Alta Velocidad, María Luisa Domínguez; los tenientes de alcalde Jaume Collboni y Janet Sanz, y la concejal y presidenta de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), Laia Bonet.

Este mismo jueves, Ada Colau pidió al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que el Consejo de Ministros aprobara un decreto para congelar de manera temporal el precio de los alquileres y que los contratos.