Sindicatos educativos anuncian huelga de cinco días en marzo tras no retirarse el calendario

Los sindicatos educativos que han pasado la noche en la Conselleria de Educación de la Generalitat han anunciado que convocarán una huelga de cinco días en marzo -sin concretar las fechas-, ante la negativa del conseller Josep Gonzàlez-Cambray a revertir el nuevo calendario escolar.

En declaraciones a los periodistas este viernes, Iolanda Segura, de Unió Sindical de Treballadors i Treballadores de l’Ensenyament de Catalunya-Federació Sindical de l'Ensenyament de Catalunya (USTEC-STES), ha añadido que si no se logra volver al calendario original, también empezarán el curso 2022-2023 en huelga: "Si el departamento y el conseller continúan con su actitud prepotente, poco dialogante e inmovilista, no empezaremos el curso", ha exclamado.

El anuncio llega después de una reunión que han mantenido el conseller y su equipo con los delegados que han pasado la noche en la Conselleria, de los sindicatos USTEC-STES, CC.OO., Intersindical-CSC, Aspepc·Sps y UGT, los cuales han abandonado el encierro tras el encuentro.

Segura ha sostenido que no se desconvocará la huelga si no se abre una negociación sobre las siguientes cuestiones: un presupuesto educativo equivalente al 6% del PIB catalán, la pérdida de poder adquisitivo, la reversión de los recortes, el currículum y el decreto de plantillas, estabilización de los interinos, FP y equiparación salarial, además del calendario.

A su vez, Marga Romartínez, de CC.OO., ha criticado que en el pleno extraordinario del Consell Escolar de Catalunya (CEC) convocado para el lunes, el único punto del orden del dìa es la comparecencia de Gonzàlez-Cambray, sin mencionar el calendario escolar, una decisión que han tachado como "otro muestra de su diálogo".

Del mismo modo, desde Aspepc·Sps han descartado que el avance del calendario no vulnere los derechos laborales, mientras que la CGT ha manifestado que la Conselleria ha "declarado la guerra a la comunidad educativa con su imposición que ya dura más de diez años y que con el conseller actual se ha agudizado; los ataques son constantes".