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Barcelona aumentará la presión fiscal en 2025
Incluyen el progresivo aumento de la tasa de residuos en 4 años y la bonificación del 50% para el vecindario que aplica el puerta a puerta.
Barcelona - Publicado el
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El Ayuntamiento de Barcelona ha logrado sacar adelante las ordenanzas fiscales para 2025. El plenario ha aprobado definitivamente la propuesta con los votos favorables del gobierno del PSC, BComú y ERC y los votos contrarios de TriasxBCN, PP y Vox.
Con la luz verde del plenario, las nuevas tasas entrarán en vigor el 1 de enero. Las nuevas ordenanzas recogen, entre otros, un incremento del IBI hasta el 1,17% en más de 200 hoteles, nuevas tarifas para los autocares turísticos cuando quieran aparcar (pasarían de los 20 a los 80 euros) o subir el tope del recargo municipal de la tasa turística para que pase de los 4 a los 8 euros.
También incluyen el progresivo aumento de la tasa de residuos en 4 años y la bonificación del 50% para el vecindario que aplica el puerta a puerta.
presión al sector turístico y recogida de basuras
El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha agradecido los apoyos de los grupos que han votado a favor y ha celebrado que haya "acuerdos", destacando que es un acuerdo "progresista". Collboni ha afirmado que con las nuevas ordenanzas sube la presión fiscal al sector turístico pero no "a las familias, las pymes o los autónomos".
Collboni también ha explicado que esta misma mañana ha firmado la prórroga presupuestaria, que estará vigente a partir del 1 de enero, y ha señalado que espera que en las próximas semanas se pueda llegar a un acuerdo de presupuestos nuevos para 2025.
En relación a las ordenanzas fiscales, el teniente de alcaldía de Economía, Jordi Valls, ha explicado que han recibido 79 alegaciones y, de estas, el gobierno ha aceptado 18 parcial o totalmente, principalmente de BComú y ERC . "Creo que son unas muy buenas ordenanzas, claramente progresistas, que se atreven a tocar teclas que nadie se había atrevido a tocar antes", ha dicho Valls.
Apoyo de BComú y ERC
La presidenta del grupo de BComú Janet Sanz ha argumentado el apoyo a las ordenanzas fiscales porque hacen pagar más al sector turístico y contribuyen al decrecimiento turístico.
Así, Sanz ha afirmado que las ordenanzas son "coherentes" con "la estrategia de dar la vuelta a la tendencia a poner alfombras rojas en las élites" y ha remarcado que, según el acuerdo del gobierno con BComú anunciado justo antes del pleno, se rechazará cualquier nueva terminal de cruceros que plantee el Puerto. "Estamos haciendo políticas coherentes", añadió.
Valls ha reprochado a Sanz "la discrepancia gestual" y ha asegurado que el acuerdo al que han llegado es "una ratificación del acuerdo inicial" y una "rectificación" de los acuerdos firmados en 2018 con el Port de Barcelona cuando Colau era alcaldesa .
"Si no confundimos relato y realidad descubrimos que estamos de acuerdo", ha dicho quejándose del discurso "agotador" de los Comunes que vincula al PSC con "las élites".
El concejal de ERC Jordi Castellana ha lamentado el "postureo" de BComú sobre las terminales de cruceros. "No hay ningún acuerdo de fondo", ha dicho Castellana, quien ha apuntado que el pacto al que ha apuntado BComú "ya estaba definido" con anterioridad.
Además, Castellana ha remarcado que los republicanos se mueven "por el impacto de las medidas" y no por el "postureo" y ha argumentado el voto a favor de las ordenanzas para que no aumenten la presión fiscal sobre los ciudadanos, sino sobre "las actividades más lucrativas", como el turismo.
El teniente Jordi Valls ha valorado la "predisposición al diálogo y los acuerdos" de los republicanos y se ha mostrado convencido de que sus alegaciones "enriquecen" la propuesta del gobierno.
"un infierno fiscal"
El concejal de TriasxBCN Damià Calvet ha lamentado que el gobierno municipal no haya aceptado sus alegaciones para "reducir la presión fiscal" en la ciudad y hacer que "la buena salud financiera del Ayuntamiento no sea a expensas de la gente y las empresas".
"No son las ordenanzas que necesita Barcelona", ha remarcado Calvet, quien ha dicho que las ordenanzas fiscales tampoco son buenas para afrontar los retos de futuro de la ciudad.
La concejala del PP Àngels Esteller ha criticado que las ordenanzas fiscales "consolidan a Barcelona como la ciudad más cara de España" y ha definido la ciudad como un "infierno fiscal" que perjudica el poder adquisitivo de las familias, así como el sector turístico, el "motor económico" de la ciudad.
Esteller ha lamentado que las ordenanzas fiscales "vuelven a criminalizar el turismo" y "castigan" a los ciudadanos.
Por último, el concejal de Vox Gonzalo de Oro-Pulido ha señalado que las ordenanzas fiscales "exprimen" a los barceloneses y que se están "repitiendo los errores del pasado". "No traten a los turistas como si venir a Barcelona fuera un castigo", ha añadido.
Presión fiscal en el turismo y tasa de residuos
Una de las propuestas para el próximo año es la aplicación de un tipo diferenciado de IBI a los establecimientos hoteleros con mayor valor catastral.
El gobierno planteaba subir el tipo diferenciado del IBI del 1% al 1,08% y finalmente queda el tope fijado en el 1,17%, una medida a medio camino de lo que pedía BComú, que quería llegar al 1,3%.