CURIOSIDADES

¿De dónde viene la expresión "coser y cantar"?

El hecho de indicar que se canta mientras se está cosiendo es lo que da a entender que ese propósito no entrañará dificultad alguna.

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¿De dónde viene la expresión "coser y cantar"?

Redacción COPE Cataluña

Barcelona - Publicado el - Actualizado

2 min lectura

El autor de la saga de libros sobre curiosidades "Ya está el listo que todo lo sabe", Alfred López, divulgador científico, nos hace algo más sabios al dar respuesta a las preguntas sobre enigmas u orígenes etimológicos de las palabras que utilizamos.

Aquí tienes tres curiosidades que no te van a dejar indiferente y te ayudarán a ser un buen "cuñao".

(ESCUCHA AQUÍ LAS EXPLICACIONES DE ALFRED LÓPEZ)

Coser era una actividad que se realizaba en reuniones

Cantar mientras se cose significa una experiencia y destreza adquirida en esa labor

¿De dónde proviene la expresión ‘Coser y cantar’?

La expresión ‘coser y cantar’ es utilizada para dar a entender que algo que se realiza es sumamente fácil de hacer.

El hecho de indicar que se canta mientras se está cosiendo (para lo que se suele necesitar cierta concentración si no se tiene demasiada experiencia) es lo que da a entender que ese propósito no entrañará dificultad alguna.

La mayoría de fuentes indican que la locución se originó en los tiempos en los que las mujeres solían reunirse para coser todas juntas y, para hacer la jornada más amena, iban canturreando diferentes coplas.

Por otra parte, hay quien señala que la expresión está sacada de un antiguo refrán que decía ‘Coser y cantar, todo es empezar’, con la que se trataba de quitar dificultad al acto de empezar a hacer alguna cosa nueva (en este caso el coser o el cantar).

Los saludos también evolucionan

A lo largo de la historia los saludos han ido evolucionando

Algunas curiosidades sobre los saludos

Es habitual dirigir una palabra cordial hacia alguien a la hora de encontrarnos o de despedirnos, el cual es denominado como ‘saludo’ y el acto en sí es conocido como ‘saludar’.

Esas palabras de saludo pueden ser varias, dependiendo de si es dirigido en el momento del encuentro o de la despedida y también del país o idioma (por ejemplo, los más comunes son ‘hola’, ‘adiós’ y ‘salud’, entre otros).

Muy común era el desear buena salud con un ‘salutem’, algo que se convirtió en usual tanto en el encuentro como en las despedidas durante la época del Imperio Romano y siglos posteriores.

También por aquel tiempo se hizo frecuente saludar diciendo el término ‘ave’, conjugación singular de la forma imperativa de ‘avere’, cuyo significado era ‘estar bien’ y que era utilizada con el sentido de ‘que estés bien’.

Recordado es el típico ¡Ave, César, los que van a morir te saludan! (Ave, Caesar, morituri te salutant) tan utilizado en el cine (hay enormes dudas de que se utilizara realmente por los romanos) y que vendría a significar literalmente ‘Que estés bien, César, los que van a morir te desean buena salud’.

Tras la expansión del catolicismo (a partir del siglo IV), se comenzó a cambiar las formas ‘salud’ (salutem) como saludo de despedida entre los creyentes por el conocido ‘adiós’, el cual es el deseo de encomendar a aquella persona ‘a Dios’ (te encomiendo a Dios). También se reutilizó el mencionado ‘ave’ para introducirlo en una oración religiosa (el ‘Ave María’).