Una mujer en estado crítico tras ser degollada por su marido delante de su hijo de 13 años

Todo ocurría sobre las seis de la mañana en el domicilio familiar situado en el número 5 de la calle Centro de Móstoles. Una discusión en la pareja acabó con la agresión del marido que hirió gravemente a su mujer clavándole un cuchillo en el cuello. Fue el hijo de ambos, de 13 años, quien tras presenciarlo todo salió corriendo a avisar a los vecinos y a sus abuelos, los padres de ella, que vivían en un piso cercano. Los abuelos habían llegado hacía poco, precisamente para estar cerca de su hija que ya les había manifestado sus problemas con el marido. Así lo ha contado un vecino que ha explicado que los padrs se habían trasladado hacía poco desde su pueblo.

Fueron los vecinos los que llamaron al 112. A la llegada de la policía, el marido no quería abrir la puerta, hasta que los agentes decidieron echarla abajo. Allí encontraron a la mujer que ya estaba en parada cardiorespiratoria porque había perdido mucha sangre. Los servicios de emergencia lograron reanimarla y la trasladaron en estado crítico al hospital 12 de octubre. Se teme por su vida.

Los agentes detuvieron al marido. Según fuentes del Ayuntamiento de Móstoles, no hay denuncias previas por violencia doméstica.

ATENCIÓN PSICOLÓGICA

El niño de 13 años es también víctima de la violencia del padre. Ahora tendrá que recibir tratamiento psicológica para recuperarse de un trauma que tiene consecuencias muy graves.

Una situación que por desgracia pasa con frecuencia porque estas agresiones tienen lugar en el ámbito familiar. Y esto genera un daño tremendo en los menores... más aún con esa edad, en plena adolescencia cuando se está forjando la personalidad. Lo ha explicado a Cope la psicóloga Natalia Ortega, de Activa Psicología. Dice que uno de los problemas de estos niños es que imiten las actitudes que han visto en los padres, ya sea de violencia o de sumisión..."el niño ha podido aprender patrones de conducta violentos o bien de alta sumisión si se ha mimetizado con su madre. Al final, ha cambiado los roles con sus figuras de referencia que son las que le tienen que proteger..." El hecho de que el niño de deje de ser "protegido" para convertirse en "protector" se denomina "parentificacion" es algo muy grave que hace muchísimo daño psicológico al menor. Estos pacientes requieren de una terapia larga y profunda para poder recuperar los daños que esas actitudes habrán ocasionado a su personalidad.