Un diente de excavadora confundido con un artefacto explosivo corta la línea C-8a entre Villalba y El Escorial

Al final ha sido una falsa alarma y todo ha quedado en un susto, pero de nuevo este martes, 18 de junio, hemos tenido incidencia en el servicio de Cercanías Madrid. Le ha tocado el turno esta vez a la línea C-8a.

“Por orden gubernativa se suspende el servicio entre las estaciones de Villalba y El Escorial en ambos sentidos, se establece un servicio alternativo de autobuses”. Era el mensaje en X (antes Twitter) que la compañía ferroviaria lanzaba… desde luego no hacía presagiar nada bueno.

Descartada la avería, la pregunta era qué hecho tan grave justificaría que la orden viniera desde las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. La cosa es que ADIF ha mantenido cerrada durante una hora la circulación después de hallarse un supuesto artefacto explosivo cerca de la zona de San Yago y Las Zorreras mientras se acometían trabajos para la colocación de pantallas acústicas en la infraestructura ferrovaria.

¿Sabotaje? ¿Atentado? No, a no ser que hubiéramos retrocedido en el tiempo, a tenor del mensaje que enseguida ha publicado en redes el ministro de Transportes, Óscar Puente.

“Nos pasa de todo, pero que tenga que suspenderse la circulación entre El Escorial y Villalba en ambas vías por la aparición de un artefacto explosivo, aparentemente de la Guerra Civil, en la línea C-8a de Madrid y mercancías, era algo que no recuerdo que hubiese pasado antes", decía.

Pues nada más lejos. Según confirmaban desde la Guardia Civil, era algo totalmente inofensivo. Una vez inspeccionadas las vías por los expertos en desactivación de explosivos (TEDAX), se ha comprobado que era un diente de una excavadora recubierto de barro.

El servicio en la línea ha quedado, después de esto, restablecido.

Una anécdota más dentro de una larga lista de 'circunstancias' que arrastra desde hace tiempo Cercanías. Según los cálculos de la Comunidad de Madrid, en 2023 se produjeron 700 incidencias que afectaron a 160.000 usuarios.