Qué hacer en Alicante este verano
Desde las playas a las rutas de montaña del interior, la capital y la provincia ofrecen lugares únicos para disfrutar de unas vacaciones
Madrid - Publicado el
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La pandemia se ha llevado por delante decenas de fiestas populares, tradiciones y eventos culturales o musicales este verano en Alicante. Pero la Costa Blanca y el interior alicantino tienen mucho que ofrecer si decides pasar unos días allí este verano. Al margen de la calidad de las playas que sitúan a esta provincia a la cabeza de la clasificación en cuanto a número de banderas azules, destacan la gastronomía y las rutas de interior, con municipios y rincones únicos y zonas naturales ideales para escapar unas horas del calor de la costa.
TRAM: PLAYAS Y MOVILIDAD POR EL LITORAL
Para comenzar este recorrido por la provincia es una buena opción subir al tanvía (Tram), con el que es posible recorrer parte de la costa alicantina, desde la capital hasta Dénia, pasando por Benidorm, El Campello o la playa de San Juan. Desde la mayoría de paradas o estaciones del litoral es posible ir caminando a las playas, con paseos y zonas turísticas repletas de bares, heladerías o restaurantes junto al mar.
La principal estación del tranvía está en la plaza de Luceros de Alicante, a 5 minutos caminando de la del AVE y 20 del aeropuerto, desde donde se puede llegar en autobús o taxi. En cualquier parada o dentro del propio tranvía es posible comprar el billete para el desplazamiento.
EN COCHE A LA VEGA BAJA
El sur de la provincia de Alicante es posiblemente una de las zonas más calurosas, pero la Vega Baja, sacudida el pasado septiembre por la gota fría, también es de obligada parada si viajas a esta provincia. Busca un atardecer para tomar unas fotos únicas en la salinas de Torrevieja, o acude a las playas de Orihuela Costa, Guardamar del Segura y otros municipios costeros del sur alicantino. Para visitar la Vega Baja lo más recomendable es utilizar coche: desde la capital se tarda menos de una hora al pueblo más lejano, aunque es posible encontrar algunos atascos en las zonas más turísticas.
ALICANTE TAMBIÉN TIENE MONTAÑA
¡Y qué montaña! Hay cientos de rutas para recorrer en bicicleta o hacer senderismo. También ríos o embalses donde darse un chapuzón. A poco más de media hora en coche de la capital se puede visitar el Parque Natural de la Font Roja (Alcoy). También es imprescindible la visita a Castell de Guadalest y su entorno natural. Pero en la costa también encontramos zonas montañosas y aquí destaca la Marina Alta, una comarca ideal para la práctica del ciclismo o el senderismo con pueblos únicos como Jávea o Dénia.
LUGARES ORIGINALES PARA DARSE UN CHAPUZÓN
Los Baños de la Reina en El Campello, las Fuentes del Algar (Callosa de Ensarriá), la Font de la Coveta (Banyeres) o las zonas habilitadas del pantano de Guadalest son lugares ideales donde darse un chapuzón alejado de las playas convencionales.
BODEGAS
La comarca del Vinalopó también ofrece una alternativa turística en la provincia de Alicante: un recorrido por las bodegas como Bocopa o Casa Sicilia es también una buena opción a sólo 20 minutos en coche de la capital.
ALICANTE CAPITAL
La capital alicantina trata de recobrar la normalidad tras la crisis del coronavirus y este verano ha puesto en marcha una serie de iniciativas para garantizar la seguridad de los visitantes. Cuenta con cinco playas abiertas al público, incluida la de San Juan, que no presenta problemas de aforo gracias a su gran extensión. También se puede visitar la isla de Tabarca: desde el puerto de Alicante parten ferrys a diario y el entorno marino de esta pequeña isla habitada es una delicia para cualquier amante de la naturaleza. Alicante también tiene una foto única desde lo más alto del Castillo de Santa Bárbara, que ha reabierto al público con aforo limitado y cita previa para las visitas.
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