El aviso de un ayuntamiento del interior ante la lucha contra el frío: "Nos cuesta 1.000 euros"

La llegada del invierno todavía no ha traído precipitaciones importantes a la provincia pero sí un descenso destacado de los termómetros, especialmente en las horas nocturnas.

Sólo la pasada madrugada, por ejemplo, las temperaturas alcanzaron los -9 grados en Ares del Maestrat o los -7 en Zorita y Sant Mateu y en otras zonas, todo y no alcanzarse valores negativos, también han pasado una noche fría.

Es el caso de Albocàsser, que se han quedado esta madrugada en 1 grado. En esta población, como en muchas otras del interior de la provincia, se apuestan por diversas opciones para entrar en calor en los hogares. La más clásica, obviamente, pasa por la lumbre de las chimeneas.

Susto en un contenedor

El problema, eso sí, llega una vez se apaga. Y es que pese a que el fuego desaparece, las cenizas todavía mantienen el calor latente que puede acarrear problemas.

Justamente el ayuntamiento de la capital del Alt Maestrat ha alertado por lo que puede ocurrir en caso de deshacerse de las cenizas de manera indebida.

El mayor ejemplo de lanzar las cenizas cuando todavía no están apagadas se encuentra en la imagen publicada en redes por el ayuntamiento de Albocàsser, un temor que viven muchos consistorios.

El susto en forma de incendio de contenedor se ha dado en este caso en la localidad, aunque lo más sorprendente es que se ha cuantificado lo que les va a costar: "Un contenedor vale 1.000€". Un sobrecoste inesperado que puede suponer un dolor de cabeza para un municipio pequeño.

¿Dónde van estos residuos?

Pero ante esta publicación, la duda está clara: ¿Dónde se tiran los restos de ceniza?

Según indican desde la organización dedicada al reciclaje Ecoembes, "la ceniza se considera residuo orgánico ya que resulta de un material sometido a un proceso de cremación. Es por ello que, se recogerá y depositará en el contenedor de materia orgánica, es decir, el contenedor de color marrón".

En algunas poblaciones, además, se han habilitado espacios y contenedores de metal para poder lanzar estos residuos. Lo que está claro, eso sí, es que ya sea en un lugar u otro, es vital esperar a que estén plenamente apagadas.