El ayuntamiento de Castellón aumentará su número de asesores

Así lo ha aprobado su Junta de Gobierno local, por lo que esta cifra pasa de los 17 que había en el anterior cuatrienio a 8 más para éste.

El portavoz del equipo de gobierno en funciones, Fernando Navarro, ha apuntado que este hecho dotará de más músculo para trabajar al consistorio y apunta a la entrada de un sexto grupo político y al crecimiento del número de ediles en el gobierno local como causas para este aumento.

Cabe apuntar además que Navarro no ha podido dar una cifra respecto a lo que supone económicamente este aumento de personal, aunque sí se ha dado a conocer a posteriori. Así, estos puestos se dividen entre un jefe de gabiente de alcaldía, con una retribución global de 44.880 euros; un coordinador de acción de gobierno, con 44.880 euros de retribución; un coordinador de comunicación, también con 44.880 euros; 4 asesores de alcaldía con 35.000 euros de retribución cada uno; 9 asesores de gobierno también con 35.000 euros; y 9 asesores de grupos políticos con 30.000 euros.

Por su parte, la Junta de Gobierno también ha aprobado la adhesión del consistorio de la capital al Plan Provincial de Lucha contra los Mosquitos, por lo que se da vía verde a los técnicos provinciales para que actúen en su término municipal. Además, Navarro ha recordado que paralelamente se seguirá trabajando con el plan local, que según ha indicado está actuando diariamente.

Prisas para las obras de Castalia

El portavoz también ha indicado respecto al parón en las obras de remodelación de Castalia por la aparición de murciélagos que “estamos metiendo prisa a conselleria para que esté el informe cuanto antes”, ya que poco más puede hacer el consistorio.

Todo ello en una Junta de Gobierno que ha aprobado entre otras cosas el nombramientos de cargos locales en varias asociaciones y organizaciones, como por ejemplo la entrada de Rafa Simó en la junta de la Autoridad Portuaria de Castellón, David Donate en el CEEI o la alcaldesa Amparo Marco en el Consell Social de la UJI o, justamente en la Universitat Jaume I, la licencia de la construcción de las instalaciones del centro de robótica subacuática.