Un irreconocible Valencia Basket abdica ante el Jairis y dice adiós a su reinado en la Copa (53-70)

Venía con dudas el conjunto valenciano, encajando tres derrotas seguidas en la Liga Femenina Endesa, algo que no ocurría desde su primera temporada en la máxima categoría nacional, la 2018/19. Jairis, guiadas por el entusiasmo y por Lou López-Senéchal, con 10 puntos de los quince primeros, provocó el minuto de Rubén Burgos, con 7-15 en el minuto 5. Se notaba algo de precipitación en los tiros, prisas, que castigaban enseguida las murcianas. Se puso peor con un triple y falta para Lou, increíble. 7-19. Once abajo. Trece, con el 7-21 obra de Bretsch.

El bloque contra las individualidades. Malos tiros, mal balance defensivo, problemas. Más, porque todo empeoraba. 7-24, minuto 9. Menos 17. Un robo con bandeja de Leti Romero rompió una sequía de canastas en juego de casi siete minutos. 10-24 se cerró el cuarto. Un 1 de 10 en triples, casi todos mal tirados, poco trabajados. Lo mejor, estar a catorce. 

Pronto los nervios pusieron la máxima desventaja, 10-28, con una pelota interior castigando el cambio defensivo. Minuto de Burgos, con el equipo descosido. 15-35, minuto 15. Pérdidas, malos tiros y segundas opciones de las murcianas sumían a las taronja en una sensación de estar en una lavadora, desesperadas. El último minuto antes del descanso fue el fiel reflejo. Tiro, fallo, rebote, tiro, fallo, rebote, tiro, fallo, rebote, tiro, fallo, rebote, tiro, fallo... bocina. 23-42. Un despropósito. 3 de 22 en triples, Iagupova 2 de 10. Ni los quince rebotes ofensivos solventaban ese paupérrimo 8 de 41 en tiros de campo. ¿Quién pararía la lavadora?

El primer ataque del segundo tiempo tuvo paciencia y acabó con una canasta bajo tablero. Después hubo una recuperación de Carrera, con transición y triple de Leti. Otro robo de Raquel y otra de Leti. A menos doce en un plis. A diez. Ni tres minutos transcurridos. Otro triple de Leti, menos siete. Qué barbaridad la canaria. Más parcial, 37-42 con dos libres de Iaguapova. Las murcianas sin estrenar marcador. Cuatro minutos y treinta segundos después, un tiro libre rompió la sequía de Jairis. Malas decisiones de Iagupova fueron castigadas con canastas y desapareció el miedo que había surgido. 37-51 con triple de Holesinska. Le había durado poco el rigor a las taronja y se volvieron a caer. 39-55. Aquí se esfumaron las opciones, porque Valencia Basket no volvió a creer en el bloque y Jairis se limitó a rematar su partidazo gestionando el último cuarto. Un duro correctivo, el cuarto consecutivo, para este vestuario que ha olvidado sus básicos. La defensa es unión y colectividad. Si defiendes unido, sueles atacar de forma colectiva. Habrá que aprender del dolor.