Jesús Vázquez da un paso adelante con los JJOO en el horizonte

Jesús Vázquez es un hombre nuevo tras dejar atrás su trastorno neuromotor. El problema de salud que le hizo temer por tener que dejar el fútbol ha quedado ya olvidado y su confianza es cada vez mayor. Se ha vuelto a sentir futbolista y ha recuperado el control sobre su cuerpo, ese que siempre le ha permitido explotar su potencia y su físico y aparecer por campo rival. Baraja confía cada vez más en Jesús y viene recurriendo a él incluso como ’11’, en un doble lateral en el perfil zurdo. Por delante 14 partidos de Liga para seguir puliendo su nivel y explotando sus aptitudes. En el horizonte los Juegos Olímpicos de París, a los que el canterano llega en el Top5 de laterales Sub-21 seleccionables.

La Sub-21 selló su clasificación para la cita en la capital francesa al clasificarse para las semifinales del Europeo, que nuestra selección acabó perdiendo en la final ante Inglaterra. Con ese torneo quedó atrás una generación de laterales y se abrió paso a una nueva. Jesús Vázquez sufrió su problema neuromotor en el mes de septiembre, por lo que no ha llegado a optar a ninguna de las convocatorias de esta temporada por estar luchando contra el problema o por motivo de la falta de continuidad.

Con Balde como fijo en la Absoluta y ahora lesionado, Álvaro Carreras (en su momento en el Granada y ahora en el Benfica) y Hugo Bueno (Wolverthampton) fueron los dos laterales zurdos citados por Santi Denia en septiembre. En octubre entró Javi López, jugador del Alavés, en lugar de Hugo Bueno, como sucedió también en noviembre. Jesús Vázquez ha estado por delante de ellos durante todas su etapa de crecimiento en las inferiores de España (Sub-16, Sub-17, Sub-18 y Sub-19), por lo que ahora buscará volver a ganarse el sitio tras unos meses en que el apartado físico se lo impedía. Por nivel, categoría en la que compite y equipo, debería ser el siguiente al que mirara Santi Denia si decide hacer cambios en esa demarcación.

Jesús Vázquez comunicó el pasado 27 de septiembre de 2023 su problema de salud en sus redes sociales: “Podría haber sido un susto mayor y tener que dejarlo todo", advertía el futbolista acompañando el texto de una foto en la camilla de un hospital en el que estuvo varios días ingresado. 106 días después volvió a ser feliz al disputar los últimos 20 minutos en Montilivi. No obstante, como advertimos, tras el regreso venía la adaptación y un duro trabajo hasta encontrar la mejor versión. No sólo física, sino también mental.

El problema de salud ha hecho madurar mucho al chaval, que cumplió 21 años en enero. Cuando volvió a competir no se veía con confianza suficiente como para jugar sin ese lastre mental. Tenía dudas sobre su capacidad de progresar con balón y correr la banda, ante el miedo de que el cuerpo respondiese como en aquel fatídico calentamiento del choque en Mestalla ante el Atlético de Madrid. Sin embargo, un fuerte trabajo mental, mucha disciplina y una vida ordenada le han permitido al canterano che de la generación 2003 olvidar por completo esa lesión. Ahora acumula diez partidos consecutivos de LaLiga participando, así como tres titularidades en los tres partidos de Copa del Rey. Ya sea como lateral zurdo o por delante de Gayà, Baraja está volviendo a darle protagonismo y él está respondiendo. Marcó el primer gol con la camiseta de su Valencia CF en Cádiz, tras más de una década en la Academia VCF.

Cerca estuvo de hacerlo también en dos ocasiones en el choque ante Las Palmas, donde precisamente salió del banquillo ocupando el carril del ’11’. Una participación que trabaja para que siga siendo más cuantiosa en cuanto a minutos, pero ya al 100% tanto física como mentalmente. En eso ha sido muy importante Baraja, como el propio jugador destacó en la Zona Mixta de Mestalla: “Me están ayudando mucho. Por un momento perdí esa confianza. Ahora cada vez me siento con más ganas y mejor físicamente. Con más confianza para atacar y para ir hacia adelante. Muy agradecido”. El león vuelve a rugir.