Un mes del caos

Ese miércoles los jugadores se despertaron como si fuera un día normal, pero no lo era. Tras el parón por las selecciones, en el objetivo estaba el Barça, la visita al Camp Nou y el inminente inicio de la Champions League.

Sin embargo, tal y como ha explicado recientemente Rodrigo Moreno, los futbolistas empezaron a informarse a través de los medios de comunicación y las redes sociales del incendio que se estaba originando en la planta noble de Mestalla. Hacía tiempo que olía a quemado, pero la primera victoria liguera (2-0 frente al Mallorca) no hacía presagiar que se desencadenaran las llamas en ese momento.

En un mes, el presidente Anil Murthy ha sido noticia demasiadas veces

Transcurrido un mes de ese momento, la ausencia de explicaciones argumentadas sigue siendo la nota predominante. Destitución fulminante del entrenador que había llevado al equipo a la clasificación durante dos años seguidos para la máxima competición continental y a la consecución del primer título para el club en toda la década, el primer trofeo levantado en la era Lim, la Copa del Rey de Sevilla.

Marcelino, fulminado. Y con él, su equipo más cercano compuesto por seis miembros. Más tarde también saldría el responsable deportivo, Pablo Longoria y quedaría incomprensiblemente apartado de sus funciones, Mateu Alemany.

Y en este tiempo, el artífice del desbarajuste, el presidente Anil Murthy, ha sido más veces noticia. Por la promesa de una explicación que nunca se produjo, por la paralización de la colaboración con la fundación abanderada por Cañizares para luchar contra el cáncer infantil o por su gesto exigiendo silencio a la grada cuando se le abucheaba.

Un mes muy largo, en el que el equipo ya con Albert Celades ha ganado tres partidos, ha empatado dos y ha perdido uno.